TEGUCIGALPA, Honduras
La administración de la primera presidenta electa de Honduras, Xiomara Castro, no pondrá trabas a la empresa privada ni al desarrollo pleno del país, aseguró el gerente de su campaña ganadora, Héctor Manuel Zelaya.
Externó que la misma premisa fue compartida por la comisión de transición designada por la futura gobernante en una reunión con los presidentes de compañías transnacionales que invierten y operan en el país.
«Les mandamos un mensaje de esperanza, estabilidad y de seguridad, mismo que ha caracterizado a la presidenta electa y que nosotros mostramos durante toda la campaña electoral», expresó.
Los empresarios -garantizó Zelaya- salieron satisfechos con la promesa vertida.
Asimismo indicó que para ellos la seguridad jurídica y el régimen fiscal son muy importantes, así como un gobierno que sea amigable y abierto a un diálogo de puertas abiertas.
Declaró que las nuevas autoridades buscarán la cercanía con la empresa privada y generar la confianza y el diálogo permanente que desean.
Del mismo modo, apuntó que el pueblo hondureño siente esperanza de que el ambiente en mención se traduzca en inversión y generación de empleo y esa expectativa se refleja en cualquier lugar que visitan.
Además, comentó que tras más de una semana de haber ganado los comicios han sostenido más de 45 reuniones con diferentes rubros y no se detendrán.
«No hemos tenido ni tiempo de celebrar; el tiempo apremia y el mandato del pueblo hondureño fue contundente y tenemos que presentar las soluciones que aclama», aseveró.
Ahondó que los encuentros multisectoriales seguirán con el propósito de que el próximo gobierno sea uno dinámico, cercano a la población y que generará desarrollo combatiendo la desigualdad que impera en la actualidad.
«En los primeros 100 días de gobierno vamos a realizar muchas de las acciones que hoy están siendo presentadas y van a salir como propuestas de estas mesas de diálogo que hemos tenido», arguyó el también hijo de la lideresa de Libertad y Refundación (Libre).
Por la comisión de transición también estuvieron presentes en el evento Rebeca Santos, Pedro Barquero, Héctor Zelaya y José Manuel Zelaya, primogénito de la presidenta electa.
TRES FORMAS PARA OBTENER CAPITAL. Barquero se refirió a la recaudación tributaria e indicó que suele gastarse en sueldos y salarios y pagos de deuda, por lo que no hay disponibilidad de recursos para atender la inversión social, efectuar mejorías en la red sanitaria o priorizar la educación.
En tal sentido, apuntó que la comisión busca tres fuentes para recoger fondos. Una de ellas es precisamente un nuevo abordaje fiscal que implique formalizar la economía informal, estrictez en la recaudación y abolir la evasión fiscal.
Asimismo analizan el reperfilamiento de la deuda y enfoques para combatir y prevenir la malversación de caudal público.
«Podemos ahorrar miles de millones de lempiras que se pierden en corrupción y que tenemos pensado invertirlos en el pueblo», manifestó.
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En el período de campaña, Castro señaló que los empresarios han sufrido recientemente no solo los efectos de la pandemia, sino la indolencia de «un gobierno autoritario e incapaz que estrangula al pueblo con más impuestos y no protege a la empresa contra los extorsionadores».
Prometió que con ella en el poder todo el sector privado de la economía tendrá un modelo de desarrollo solidario bajo un gobierno democrático y transparente que facilite el acceso a crédito, al mercado y los incentivos para generar empleo y riqueza.
«El sector empresarial y el sector social de la economía son fundamentales para aumentar nuestra capacidad productiva y las exportaciones», subrayó.
Con dichas promesas en el listado de pendientes, Xiomara Castro se apresta a ser investida el 27 de enero después de un contundente triunfo en las elecciones generales, en las cualesa amasó más de 1.7 millones de votos en su favor.
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