TEGUCIGALPA, Honduras
«Al inicio que en cada elección de la Corte Suprema de Justicia un grupúsculo con poder se reúne para mantener la justicia dormida y que continúe la impunidad», aseveró la directora del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) Gabriela Castellanos.
En una carta abierta escrita por la titular de esa instancia de sociedad civil, explicó cómo ha sido sido históricamente el proceso de elección de magistrados del Poder Judicial y sus consecuencias.
Aseguró que quienes han ocupado estos cargos han secuestrado la justicia, desfigurando la democracia y «estos atropellos solo los podremos detener con una sociedad organizada y vigilante que denuncie y condene a los que se sirven del poder».
Indicó que personas con poder escogen a los 15 magistrados con el fin de «bailar el vals de la corrupción» en el poder del Estado encargado de impartir justicia.
Además, lamentó que el país ha estado atrapado entre los anaqueles de la impunidad y cargados de un pasado que ha acumulado hambre y éxodo.
«Esos mismos personajes presentan en sociedad a las y los 15 que bailarán el vals de la corrupción ante la ciega -diosa- Temis. La historia nos expone el daño que hace el miedo de los buenos sumergidos en el sueño de los justos, nos muestra un país atrapado en los anaqueles de la impunidad cargados de un pasado que acumula hambre, resignación y éxodos», externó.
Agregó que la historia se ha encargado de advertir a la sociedad que de las acciones y decisiones de hoy depende que dentro de los próximos años el pasado no empapele la justicia, como lo ha hecho los últimos siete años en los que ha estado la actual Corte.
Dijo que la elección de magistrados y fiscales se ha visto marcada por padrinazgos, usando estos nombramientos para pagar favores y comprar voluntades.
Sin embargo, señaló que como instancia de sociedad civil pide a la ciudadana que no deje de exigir la conformación de una nueva Corte que se estrene en el buen ejercicio de la aplicación de la ley, sin que esto signifique adaptarse a las tallas de los poderosos, sino regresar a la idea prima de que todos somos iguales ante la ley.
Además, afirmó que el Consejo Nacional Anticorrupción sigue imparable en su lucha para que el Poder Judicial no debe ser de vínculos y conectes, mucho menos de aspirantes avorazados y ávidos por pertenecer a los supremos.
«Estamos a menos de un mes de modificar el rumbo torcido de quienes han maniobrando con la ley bajo el brazo y no será con ataques viscerales que nos callaran, llegó la hora de hacerle justicia a la justicia», finalizó.
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