TEGUCIGALPA, Honduras
Las remesas recibidas en Honduras durante 2021 superarán los siete mil millones de dólares, una cifra nunca antes vista en el país, de acuerdo a la previsión de expertos.
El economista del Foro Social de la Deuda Externa en Honduras (Fosdeh), Obed García, estimó que el flujo en diciembre será de unos mil millones de dólares, causando que el monto total sea de unos siete mil 500 al término del año.
Indicó que la recepción de un capital de tal magnitud se traduce en el mejoramiento de la capacidad de consumo de los hogares que tienen familiares en el extranjero, aportando a una economía que sigue, sustancialmente, amparándose en las remesas.
«El 20 % de la economía se sostiene de la expulsión de los hondureños, quienes se vieron obligados a desplazarse del país producto de la falta de oportunidades, la inseguridad ciudadana u otros elementos», expresó.
El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), José Luis Rivera, hizo un análisis similar, valorando que las remesas para el año en curso subirán un 24 por ciento, alcanzando al menos siete mil 100 millones.
«Es algo bueno y malo, porque no se produce en el país, son compatriotas que por una u otra razón se han ido del país y trabajan en el exterior y su preocupación es mayor por su gente y envían más dinero», apuntó.
Destacó que la tendencia se ha mantenido hacia al alza, pues 2020 también fue un año positivo en cuanto a esta fuente de recursos, pese a la expectativa de que Estados Unidos tendría problemas económicos por las múltiples afectaciones de la pandemia de coronavirus.
Rivera puntualizó que las remesas representan entre un 26 y un 28 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Honduras.
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El también economista Claudio Salgado prevé una cifra final en 2021 de alrededor de siete mil 200 millones dólares, lo que representaría un incremento de mil 500 con relación a 2020.
Consideró que la llegada de más remesas significa que cada vez más hondureños migran a otros países con el propósito de mejorar sus condiciones de vida.
Mencionó que no hay dudas de que EE. UU. es el país de donde más procede el dinero, pero resaltó que hay una subida en la inyección monetaria desde México y España, otros territorios donde se han refugiado compatriotas en búsqueda de satisfacer sus necesidades.
Sin embargo, aclaró que la mayoría de las remesas no se están utilizan para inversión, sino como una forma de subsistir en un país en el que un 70 por ciento de la población está bajo el umbral de la pobreza.
Un informe presentado el pasado sábado por el Banco Central de Honduras (BCH) respalda la versión de Salgado, indicando que el 83.2 por ciento de las familias destinan el dinero a gastos de alimentación, salud y educación, y solo un cuatro por ciento lo utiliza en inversión de capital o mejoras de bienes.
Según el documento de la autoridad monetaria, cambiaria y crediticia, Honduras recibió entre enero y el 9 de diciembre seis mil 854.7 millones de dólares, 28.9 por ciento más que en el mismo lapso en 2020.
Precisó que el 81.3 por ciento de los hondureños envió una remesa promedio de 425.2 dólares cada mes y el 95.2 por ciento se envió mediante transferencias electrónicas.
Además, el BCH comentó que las remesas son la principal fuente de divisas del país, por encima de la exportación de camarón, los productos de la maquila o el café.
