TEGUCIGALPA, Honduras
Los docentes hondureños jubilados con la antigua ley del Instituto de Previsión para el Magisterio (Inprema) podrán recibir en vida los salarios que solían entregarse a los familiares únicamente cuando el pensionado fallecía.
El beneficio será de un total de 60 mensualidades a las cuales podrán acceder anticipadamente los maestros contemplados, debido a la reforma a los artículos 3, 123 y 126 de la normativa.
Además, el decreto contentivo de la ley (57-2019) indica que si muere un jubilado, le otorgarán las rentas pendientes a sus beneficiarios asignados o a los a los herederos a quienes legalmente les corresponda.
La dirigente de la Plataforma de Jubilados y Pensionados del Inprema, Laura Argentina Galvez, detalló que próximamente comenzará la elaboración del reglamento que contemple los detalles de los pagos.
«Tenemos 60 días después de la publicación del decreto para hacerlo», precisó.
Anticipó que le darán prioridad a los docentes con mayor edad y a quienes tienen problemas de salud.
Además, apuntó que el apoyo llega de manera tardía, pues asegura que si hubieran tenido el beneficio antes de la pandemia, muchos docentes se habrían salvado de la muerte.
«Se nos ha muerto una gran cantidad de docentes por no tener el dinero para un medicamento o una operación», lamentó.
El dirigente magisterial Geovanny Coello mencionó que a los maestros activos se les aumentará la cotización gradualmente año a año, por lo que la gratitud debe ser con el propio gremio y no con los políticos.
«Es un logro del Inprema, de nuestro dinero, de los intereses que genera lo que aportamos, no hay que felicitar a los políticos», expresó.
Por otra parte, dijo que es oportuno preguntarse si el reglamento beneficiará a los profesores que tenían un salario bajo o a otros que se jubilaron con más de 80 mil lempiras como -ejemplificó- el pastor Evelio Reyes.
«Hay que ver si realmente beneficia a los docentes que se jubilaron con un sueldo pírrico o a los magnates de la educación que lo hicieron con sueldos altísimos», subrayó.
Advirtió que si la normativa contempla también a los maestros que tenían jugosos salarios entonces serán «dilapidados» los fondos del instituto.
El decreto que da vida a las nuevas disposiciones se aprobó en 2019 en el Congreso Móvil de Gracias, Lempira, pero permanecía pendiente de su publicación, que se hizo el pasado 26 de octubre de 2021 en La Gaceta.
Las enmiendas no favorecen a quienes se jubilan bajo la nueva Ley del Inprema, dado que la misma contempla otros beneficios económicos para quienes pasan a la inactividad laboral.
