En conferencia de prensa, Theodore Dale Vukanoch, dueño de la empresa “Dale Vukanovich” -responsable de la auditoria del proceso electoral-, ha anunciando que pronto presentaran a todos los actores “todo lo que ha pasado con estas elecciones.”
“A nosotros nos ha afectado mucho lo que se ha dicho sobre nuestra empresa que ha trabajado en más de 12 países.”
El representante agradece a las organizaciones internacionales por haber estado presentes durante todo el proceso. Refiriéndose a los informes presentados por las dos misiones de observación.
Sobre el de la OEA, presenta un comunicado, en el cual describe, está dirigido a toda la ciudadanía, sin lenguaje técnico.
Entre los puntos torales, se destacaron las siguientes líneas y comentarios:
“Las opiniones vertidas las ultimas semanas ha afectado mi imagen.”
«Es una situación demasiado cargada de mentiras.”
“La saturación fue la que causó la caída del sistema.”
AgregaVukanoch que él pidió la primera auditoria a la OEA -mientras muestra un mensaje de whatsapp en su celular dirigido a Quiroga (jefe de la MOE OEA)-, el 7 de diciembre, “no nace del TSE” la propuesta de auditar el sistema, comenta mientras se detiene en la lectura del comunicado.
El corazón del proceso electoral es la base de datos, “el auditor ha venido durante una semana, y nosotros exigimos a diario que lo haga y se ha rehusado”, refiriéndose al técnico de la OEA.
“Informamos que la base de datos no fue alterada, estuvo blindada ante cualquier ataque”.
“Nos sorprendió que el técnico de la OEA rechazara la revisión.”
“La evidencia de la OEA se basa en simples supuestos. Exigimos que la OEA rectifique su informe. Si la OEA insiste en hacer aseveraciones nos reservamos el derecho de tomar las acciones en las instancias correspondientes internacionalmente. Quizá con motivaciones que no conocemos quieren dañar, no solo mi imagen, sino, dañar por completo el proceso electoral. Si han dicho que hubo vulnerabilidades y no las identifican.”
“La OEA es capaz de dudar porque dice, no podemos confirmar, pero si podemos confirmar un supuesto, pero no son capaces de comprobar con pruebas.
“Responsabilizo directamente al técnico de la OEA, vino a revisar otras cosas, pero no la base de datos”, asegura molesto Vukanovich. “Eso lo catalogo como falta de ética. Yo vengo acá porque estos hechos hablan y soy el primero que pidió que haya una auditoria.”
La OEA y esos informes tienen que ser rectificados, porque están haciendo mucho daño no solo a mi, sino a un país entero.
