Autoridades del Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa), informaron que gracias a las tormentas de jueves y viernes que cayeron sobre la capitalse produjo una leve mejora en los niveles de las represas La Concepción y Los Laureles, principales abastos de la capital.
“Arrancó como debe de ser el invierno, todavía está empezando, no han subido como deben los niveles aquí (La Concepción) subió 29 centímetros, de 6.4 a 6.6 millones de metros cúbicos de agua, Los Laureles subío de 3.3 a 3.4 millones de metros cúbicos, o sea que subió 25 centímetros”, detalló Carlos Hernández, Jefe de la región metropolitana del Sanaa.
Esto es un alivio para los capitalinos, pero aún no se puede celebrar, ya que el aumento en el nivel es insuficiente para afrontar la demanda en el verano.
“Todavía es poco, pero el suelo está saturado, esto apenas empieza solo quedan 40 días de lluvia y necesitaríamos prácticamente que llueva todos los días para poder lograr niveles aceptables, pero aún es difícil la perspectiva, no nos alegremos por estas dos tormentas”, agregó Hernández.
Previniendo esta sequía, el Sanaa agregó en La Concepción una línea para agua desde Jiniguare con lo que se incorporá un millón de metros cúbicos a esa represa, también repararon la cortina que mantendrá 3 millones de metros cúbicos más que antes se perdían.
La Alcaldía Municipal ha perforado tres pozos para distribuir agua en sectores a los que no llega por la tubería, y por su parte el Sanaa también ha perforado seis pozos, la entrega del vital líquido se hará con apoyo de cisternas del Comité Permanente de Contingencias (Copeco).
El jueves y viernes la capital recibió fuertes tormetas en la tarde y noche, expertos de Copeco explicaron que en los próximos 40 días que dura el invierno, debería de caer la misma cantidad de agua que debió caer en los últimos 90 días desde que comenzó el invierno.
