Dialogamos con el Padre Ismael Moreno -Melo como cariñosamente se le llaman- Director del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación de la Compañía de Jesús en Honduras (ERIC), sobre la caravana de migrantes que cruza el territorio mexicano hacia el sueño americano (Estados Unidos) y que ha desatado una furia en el presidente Norteamericano Donald Trump, quien los acusa de ser delincuentes que van a dañar y contaminar el territorio de Estados Unidos.
Donald Trump parecer representar el corazón racista de los estadunidenses que votaron por el.
Padre Melo: Es interesante que la mayoría de los que integran esa caravana que va rumbo a Estados Unidos sean hondureños, y yo no he escuchado declaraciones de funcionarios o a la misma casa presidencial sobre que le estén dando un seguimiento como la atención que se les está dando en México e incluso la atención -aunque indebida- que le ha puesto el propio Donald Trump, porque ve la amenaza, el peligro de la población latina que incursiona en territorio estadounidense. Reflexiona el Padre Melo.
En opinión del Director del ERIC, esto un signo de los tiempos que esta advirtiendo que el mundo no está de acuerdo en cómo está organizada la sociedad, de cómo está organizada la economía y está pujando hacia el norte para reclamar los derechos que le corresponde, para decir que este mundo no es solo del norte, ni es solo del sur sino de todos los habitantes, de todo el género humano.
Y por lo tanto los del sur tienen el pleno derecho de ir a reclamar y hacerse presente en el norte para exigir que ese modo de vida que lleva el norte, en particular el estadounidense es a costa de la sangre de las poblaciones mexicanas, guatemaltecas, salvadoreñas, hondureñas y que no puede haber un modelo de vida sin la gente espoleada que en este momento está siendo simbolizada en los emigrantes.
Por eso la caravana debe llamar la atención de toda la gente de Honduras y buscar como solidarizarse, acompañar y divulgar lo que está ocurriendo, porque en la suerte de la caravana está la suerte de los hondureños y hondureñas que estamos viviendo dentro del territorio hondureño.
¿Como orden Jesuita qué seguimiento le dan, tienen conocimiento de su estado, cómo se desplazan, qué tipo de apoyo tienen en suelo mexicano?
Nosotros los Jesuitas tenemos algunas casas que las llamamos de migrantes: en Veracruz, Ciudad de México y en Saltillo, junto con monseñor Raúl Veras. Tenemos también en toda la zona de Tijuana zona fronteriza con el Estado de California ahí se encuentran Jesuitas y de la Compañía de Jesús acompañando la caravana tanto en el nivel humanitario como en el campo jurídico, nosotros en la Compañía de Jesús tenemos una instancia que se llama Red Jesuita para migrantes (RJM) y estamos acompañando tres niveles, una con presencia directa, también con incidencia en los estados por donde pasan para que se le respeten los derechos y a través de las investigaciones para presentar propuestas de leyes en políticas públicas que contribuyan a favor de los emigrantes.
¿Hay medidas de protección para los compatriotas y en general para los centroamericanos que viajan?
La migración es propio de los que tenemos fe cristiana, porque emigrante fue el señor Jesús desde el momento que nació y tuvo que huir a Egipto para escapar de una muerte por parte del rey Herodes. Migrante fue el pueblo de la Biblia paso 40 años en el desierto para buscar la libertad después de haber salido de la esclavitud. Migrantes son los pueblos que han tenido que buscar solución a sus problemas, la migración es propia, identitaria de la fe cristiana por lo tanto es una responsabilidad de la iglesia acompañar a los migrantes porque ya en la Biblia se dice: extranjero fuiste en el país de la opresión, por lo tanto se tiene que apoyar a los migrantes a los extranjeros porque justamente en ellos se hace el paso exigente y liberador del Dios de Jesucristo.
La presencia de personas que fueron dirigentes políticos como el caso de María Elena Colindres que va tras el sueño americano y que fue diputada suplente, cuáles son sus consideraciones padre:
Sumamente interesante y llamativa la presencia de ella primero porque se trata de un personaje político que salió del Congreso quizá peor de como entró, ella no va acompañando a los migrantes, va como migrante porque su situación económica no le permite vivir dignamente y atender a sus siete hijos en Honduras, es un caso que nos invita a reflexionar que la política no necesariamente es para enriquecer a la gente sino que la política es modo de servir a la sociedad como lo está demostrando esta exdiputada. Algo sencillo y claro, si María retorna al país, yo mismo voy a promover que se vuelva a lanzar de candidata a diputada porque es el tipo de políticos tanto hombres y mujeres que se necesitan para recuperar la política de manos una elite corrupta que tenemos en el país para que podamos convertir la política en el modo de construir lo público como bien común y no solo como bien de unos pocos.
Hay quienes consideran que el presidente Trump utiliza esto para fortalecer sus grupos racistas al interior de los Estados Unidos:
A lo mejor no de manera explícita, pero si ciertamente un gobierno racista y discriminador como Donald Trump con estas posiciones lo que hace es despertar la furia de un racismo latente y agazapado que hay en Estados Unidos, porque la sociedad de estadounidense es esencialmente racista, eso no se tiene que negar sino ¿por qué decenas de millones de personas votaron por Donald Trump? porque miraban en este hombre el símbolo de lo que hay en el corazón de mucha de la sociedad estadounidense, un corazón discriminador hacia los pueblos que no son blancos y ven en la gente que es de otro color especialmente en los latinos y negros una amenaza para la pureza de su sangre, eso se llama racismo y creo que nosotros tenemos que estar en contra de ello.
Se considera que si se ratifica el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre México y Estados Unidos, la vida de los emigrantes está en peligro porque el gobierno de Peña Nieto y el que le reemplace tomarían medidas coercitivas y hasta represivas contra ellos.
La vida de ellos ya está en peligro en México, es más la frontera es vertical entre México y Estados Unidos desde muchos años es un enorme peligro, nosotros tenemos testimonios por el trabajo que realizamos a través de la Red Jesuita para migrantes (RJM),del maltrato físico. Personalmente pude estar en una conferencia sobre la política migratoria de los Estados Unidos y el representante del trabajo de migración del gobierno mexicano, dijo textualmente; nosotros el gobierno mexicano no capturamos emigrantes, capturamos delincuentes, ¿qué quiere decir eso para los centroamericanos y los hondureños? Que quizá ven a todos los que pasan por ahí como delincuentes y no como una población merecedora de acogida y de respeto a sus derechos.
