ANTE LA DEMOCRACIA ESTILO HONDURAS: COMANDOS INSURRECCIONALES

EGO26 abril, 2018

Por Gilberto Ríos Munguía (•)

En las últimas semanas ha causado revuelvo en los medios de comunicación y la opinión pública nacional, el llamado a las bases de la Alianza de Oposición Contra la Dictadura a crear u organizar los Comandos Insurreccionales para continuar con la lucha en la calle, demandando el esclarecimiento de los resultados electorales del 26 de noviembre de 2017, justicia para más de cuarenta compatriotas asesinados en el marco de las primeras protestas contra el fraude, la libertad de los veintidós Presos Políticos y el retorno seguro de al menos dos jóvenes dirigentes que se encuentran en el exilio.

La prensa corporativa indaga diariamente sobre la naturaleza de estas nuevas estrategias de organización y lucha que propone la oposición política que hoy en Honduras tiene apoyo abrumadoramente mayoritario, la preocupación de la oligarquía es enfrentar un pueblo alzado y organizado que tenga capacidad de luchar por sus derechos, ¿Pero hasta dónde esta propuesta tiene un contenido “violento” como lo han querido proyectar?

Mencionamos que los simpatizantes y militantes que protestaron en los días, semanas y meses posteriores al fraude recibieron un trato violento e inhumano por parte de las fuerzas represoras del Estado, esto tiene un antecedente inmediato en nuestra historia y es la persecución y también asesinato vivido por los sectores organizados después del golpe de estado de 2009 contra en Presidente Manuel Zelaya y a continuación en el corrupto gobierno de Porfirio Lobo Sosa, pero esta represión se manifestó en la persecución laboral, acompañado de una política anti sindical violenta y de espectro general  que enfrentó a todas las organizaciones sociales opositoras al primer y segundo gobierno del Partido Nacional, Juan O. Hernández es una versión repetida de esa represión sistemática ya cumple casi 10 años; el acento a esta política y su evidencia más clara es el asesinato aún impune de la lideresa indígena y ambientalista Berta Cáceres.

Joseph Goebbels –secretario de propaganda del régimen nazi- estableció en su norma de comunicación que había que culpar al enemigo de los defectos propios, para generar confusión y falsas asociaciones en el imaginario de las masas. Los medios al servicio de la oligarquía extrajera que es dueña de Honduras, repiten esa falsedad de la “violencia” de la oposición cuando en la realidad se demuestra que las agresiones han sido cometidas de manera unilateral contra aquellos /as que han hecho uso de su derecho a la protesta pública.

Tal vez –y de manera autocrítica- sea algo rimbombante hablar de “comandos”, pero no de insurrección porque ese derecho está contemplado explícitamente -y con esa misma palabra- en el texto constitucional de uso actual (no diremos vigente), pero la realidad objetiva es que el pueblo no solamente tiene el derecho sino la necesidad de reorganizarse para rescatar la protesta pública y presionar porque en el país se haga justicia frente a tantas violaciones flagrantes a los derechos humanos.

“Elecciones estilo Honduras” es una voz en la historia de nuestro país que describe la libertad de las élites tradicionales para cometer fraude y arbitrariedades sin límites de ninguna índole. Fue así como “revirtieron” los resultados de noviembre que claramente daban la victoria al Ing. Salvador Nasralla; mentiras orquestadas en los medios, represión en las calles y el respaldo de los gobiernos conservadores que validaron la barbarie.

El turno es de los /as dirigentes sociales y populares que encarnen valores democráticos y capacidades organizativas; ninguna respuesta para la grave crisis que vive el país vendrá de las instituciones del Estado. La búsqueda y la construcción de la democracia se darán en la misma medida que los partidos, alianzas y nuevas formas de articulación, sean capaces de superar la represión y hacer valer la clara voluntad de las mayorías en Honduras, que demandan la caída del régimen, la prisión para los asesinos y la cárcel para los saqueadores.

(•) Dirigente del Partido Libertad y Refundación.

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