El coronavirus no ha sido la primera ni la última pandemia que ha vivido el mundo.
África ha luchado contra otras epidemias como el VIH/sida y otro reciente brote del ébola que fue declarado como epidemia en el 2014 afectando a países occidentales del continente africano.
La mayor parte de los países de África viven en un estado de precariedad y de pobreza extrema, los conflictos armados también han devastado las regiones y el cambio climático ha causado un impacto siendo dos causas que presionan a que las personas migren hacia otros territorios.
El ébola es una de las enfermedades mortales con una tasa de letalidad de más del 50% que provocó más de 30 mil infecciones y 11,000 muertes entre el 2014 al 2016. Desde Guinea hasta Liberia se extendió y en la actualidad se siguen reportando un menor número de casos. No obstante, los países africanos enfrentan otro tipo de enfermedades desde la malaria, diarrea, enfermedades respiratorias, que incluso podrían ser tratadas si el medicamento estuviera disponible y el virus de la inmunodeficiencia (VIH).
Otra epidemia que sigue sin tener una vacuna es el virus de la inmunodeficiencia. Gracias a los avances médicos y descubrimientos de esta enfermedad, las personas con el VIH pueden recibir tratamiento y tiene una posibilidad de vivir una vida sana y normal.
Aunque los números de decesos por causa de este virus ha disminuido, casi un millón de personas han fallecido por causa del VIH y unos 37 millones viven con esta enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por otro lado, Europa y Asia han tenido un incremento en un 30% , extendiéndose sobre todo el países del este y la zona central de Asia.
Dengue en América Latina
América Latina también muestra que la epidemia del dengue causado por el mosquito, no ha frenado. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) reportó que más de tres millones de personas fueron infectados en el 2019, causando la muerte de casi dos mil personas.
Nicaragua fue uno de los países en registrar, en Centro América, más de 2,900 más el año pasado, seguido de Belice y de Honduras. Pero Brasil es el que ha sido el más afectado con más de 2 millones de personas infectadas por el aedes aegypti y le sigue México con unos 268,458 casos.
La Organización Mundial de la Salud había anunciado que otra pandemia de influenza podría ser pronosticada, sin embargo se desconoce cuan grave será y cuándo sucederá. Es por esto que se mantienen en supervisión cómo circula los virus de influenza para la detección de cepas pandémicas.
