TEGUCIGALPA, Honduras
El presidente del Congreso Nacional Luis Redondo sometió a debate del pleno el dictamen de la Ley de Justicia Tributaria, en su primer debate después de mucho tiempo de estar siendo socializada con los distintos actores económicos sociales y políticos del país.
A través de su cuenta de X el Legislativo posteó que uno de los objetivos de la aprobación de esta ley es poder generar empleos de calidad en condiciones que sean de beneficio para el pueblo hondureño a través de la inversión extranjera y nacional.
Asimismo, establecer un sistema tributario más equitativo aumentando los ingresos sin imponer nuevos impuestos ni elevar las tasas existentes, lo que permitirá mayor capacidad fiscal para atender las demandas sociales pendientes.
Sin embargo, minutos después de comenzar la discusión el Partido Nacional comenzó una protesta en contra de la referida ley y adelantó que no aprobarán tal iniciativa al igual que otras fuerzas políticas opositoras, por lo que Redondo suspendió la sesión.
“Es lamentable que hoy ustedes hayan querido parar la discusión del primer debate de esta ley, por lo que se suspende la sesión y se convocará oportunamente a través de los medios del Congreso”, puntualizó Redondo.
“Con la votación y aprobación de la ley se sabrá a quién pertenece el voto de cada congresista coma si a una clase privilegiada o al pueblo hondureño”, afirmó y advirtió que hay medios como el plebiscito para que opine el pueblo y pueda validar esta iniciativa de ley.
Redondo aseveró que luchará hasta conseguir los consensos para aprobar esta ley porque de lo contrario se le consultará al pueblo y serán ellos los que dirán en las elecciones generales si quieren o no la ley.
Por otra parte, el vicepresidente del congreso nacional Hugo Noé Pino aseguró que el Partido Nacional quiere boicotear la discusión de esta ley, “esta ley ha esperado un año y seis meses para su discusión”.
De acuerdo con el gobierno esta ley cimentará las bases para la construcción de un sistema tributario más justo y equitativo incrementará los ingresos tributarios sin crear nuevos impuestos o tasas lo cual permitirá una mayor suficiencia fiscal para hacer frente a la demanda sociales.
Esta ley no permitirá que exista la evasión fiscal en el impuesto sobre rentas en el patrimonio de las personas naturales o empresas y elevará la recaudación de impuestos a las grandes empresas para reducir la inequidad en la cobro de impuestos.