TEGUCIGALPA, Honduras
El titular de la Secretaría de Seguridad, Gustavo Sánchez reveló la lista de los 16 nombres de los hondureños con órdenes de captura pedidos en extradición por tráfico de cocaína a EE.UU.
Por cada uno de los extraditables la Policía Nacional está ofreciendo una recompensa entre 200 y 500 mil lempiras a quién brinde información que ayude a dar con el paradero de los sindicados y puedan capturarlos.
Sánchez indicó en su alocución que entre 2022 y 2024 “hemos capturado a 35 personas con fines de extradición, solo en 2024 hemos capturado a 16 extraditables, en 2023 a siete y en 2022, alrededor de 12 detenidos por narcotráfico”.
En realidad, dijo, «son menos órdenes de captura, pero son 16 personas porque hay algunas en las que vienen tres personas en ellas, algunos son familiares y otras porque pertenecen a la misma estructura criminal»..
Entre los extraditables están: Elmer Montoya Muñoz, Juan Carlos Bobadilla, Elmer Omar Montoya Natarén y Wilmer Adonay Montoya Natarén originarios de Limón, en el caribeño departamento de Colón.
Además, Henry Hernández Escobar del clan Valle Valle, Joel Armando Galeas, Oscar Rafael Leiva de Juticalpa, Olancho, Juan Carlos Perdomo de Santa Rosa de Copán y Delis Abner Martínez Palencia de Florida, siempre en Copán.
También están en el listado Erlis Antonio León Castellanos, Bardemar Roque Negrete de El Paraíso, Copán, Ricky Juárez Haylock de Puerto Lempira, Miguel Ángel Urbina, Carlos Fernando Urbina de Yoro.
Llama la atención sobre el exvicealalde de la occidental ciudad de Gracias, el nacionalista Mario José Cálix Hernández, más conocido como Cubeta y el jefe marero Alexander Mendoza, más conocido como Porky, quienes permanecen en paredero desconocido.
Según las investigaciones, Cálix Hernández era protegido por las autoridades anteriores por tal razón la orden de captura no apareció por ningún lugar, aseveró Sánchez.
Y es que el exlíder nacionalista se encuentra en ese listado y a pesar de ello logró tener el aval de las autoridades anteriores, al extremo que bajó su perfil tras ser sindicado en delitos de narcotráfico, no obstante, gozó de impunidad lo que le facilitó su desaparición.
Hasta el momento, su entrega a la DEA, como se tenía previsto hace algunos años, nunca se cumplió.
En tanto, Sánchez aseguró que Honduras sigue operando «bajo un narcoestado «que en su momento dirigieron los hermanos Hernández recluidos en cárceles de EE.UU.