WASHINGTON, EE.UU.
Un grupo de 15 periodistas y otros miembros del diario El Faro, en El Salvador, presentaron el miércoles una demanda en los tribunales de Estados Unidos contra la compañía israelí NSO Group, a quien responsabilizan por el desarrollo del programa Pegasus con el que fueron monitoreados a través de sus teléfonos móviles.
La demanda fue presentada ante la Corte de Distrito Norte de Estados Unidos en el estado de California, de conjunto entre los afectados, El Faro, y el Knight First Amendment Institute, de la Universidad de Columbia, en Washington.
“Estos ataques de software espía fueron un intento de silenciar a nuestras fuentes y disuadirnos de hacer periodismo”, afirmó Carlos Dada, cofundador y director de la publicación y citado por la institución educativa.
Este sería el primer caso presentado por periodistas contra NSO Group en un tribunal de EEUU.
Los periodistas denunciaron que sus dispositivos móviles fueron intervenidos usando el invasivo programa y responsabilizaron al gobierno de Nayib Bukele por el espionaje.
El grupo de derechos humanos Amnistía Internacional, que colaboró con Citizen Lab en la investigación, comentó en enero de este año a la Voz de América que la confirmación de la intervención no hace más que develar “una nueva amenaza para los derechos humanos” en El Salvador.
Según Astrid Valencia, investigadora para Centroamérica de la institución, “con esta verificación se abre un capítulo preocupante (…) donde vemos el ambiente de hostilidad, acoso, hostigamiento que están sufriendo los periodistas y las personas defensoras de los derechos humanos”.
Este miércoles Knight First dijo que en los últimos años el spyware de NSO Group «ha sido utilizado por regímenes autoritarios y violadores de derechos de todo el mundo para atacar a periodistas, activistas de derechos humanos y disidentes políticos».
El gobierno de El Salvador ha negado su responsabilidad en los hechos, una portavoz gubernamental dijo a Reuters que investigan el uso del programa y que no tienen siquiera acceso al mismo.
NSO Group no respondió de inmediato a solicitud de comentarios por correo electrónico de la VOA.
