Nueva York se arremanga para asistir a migrantes pese a silencio de Texas

Redacción El Pulso27 septiembre, 2022

MONTEVIDEO, Uruguay

Las autoridades de Nueva York (EEUU) y varias ONG asisten diariamente a decenas de migrantes enviados por Texas, algunos que llegan sorprendidos del destino y otros sobre los que la ciudad no sabía de su arribo, dijo la directora de comunicación de la oficina del alcalde para Asuntos del Inmigrante, Shaina Coronel.

«La alcaldía ha intentado contactarse con la oficina del gobernador [de Texas, Greg Abbott], él se negó a comunicarse con nosotros, y por la falta de comunicación de su lado y por el hecho de que hace firmar un acuerdo de no divulgación a las compañías de autobuses, con frecuencia asistimos a autobuses de los que no teníamos aviso», explicó Coronel a la Agencia Sputnik.

Abbott lanzó en 2021 la Operación Lone Star (Estrella Solitaria) para combatir la inmigración ilegal, y en agosto pasado comenzó oficialmente a enviar migrantes en autobús hacia las llamadas «ciudades santuario».

Pero reportes de medios y de las organizaciones no gubernamentales que asisten a los migrantes, en su mayoría latinoamericanos, indican que los autobuses comenzaron a llegar al menos a Nueva York varios meses antes.

Según la oficina del gobernador republicano, desde el 5 de agosto Texas ha enviado a Nueva York unos 2.700 migrantes.

Coronel afirmó que el número es mucho mayor. «Puedo decir que es mucho más que 2.000 personas las que él [Abbott] envió a Nueva York. Llegan seis o siete autobuses por día, el domingo 18 [de septiembre] recibimos un récord de 9 autobuses», contó la directora de comunicación.

Las ciudades santuario —como Nueva York, Washington, DC y Chicago (norte)— tienen medidas para proteger a los inmigrantes, además de brindarles asistencia legal, y en los casos de los recién llegados desde Texas, un traslado hacia donde se encuentren sus familiares en el área.

La mayoría tiene papeles migratorios que recibieron antes de ser liberados por la Oficina de Control de Aduanas y Protección Fronteriza —CBP por su sigla en inglés—, cuyos funcionarios consideraron que eran elegibles para pedir asilo.

El estado sureño envió a más de 10.000 migrantes desde principios de agosto a esas tres ciudades.

Los migrantes, en su mayoría latinoamericanos, atraviesan EEUU en un viaje de más de un día hacia el norte o el este sin ninguna escala llevando solo lo puesto, casi sin agua ni alimentos.

Las imágenes de medios, autoridades y las organizaciones benéficas muestran a los migrantes, entre ellos niños, mujeres embarazadas y familias enteras, bajar del autobús con apenas una bolsa de nylon en la que cargan sus pertenencias.

«Es indignante lo que [Abbott] está haciendo, y lo está haciendo de manera intencional, lo está haciendo para crear confusión», afirmó Coronel.

Comentó que algunas personas se bajaban del autobús «y se mostraban confundidas y desorientadas» porque dicen que tienen familia en Chicago y Nueva York no era su destino final.

«Los están obligando a subir a los autobuses», añadió. Las autoridades de Nueva York y recientemente las de Chicago acusan a Abbott de utilizar a los migrantes como peones políticos a poco más de un mes de las elecciones de medio mandato en las que se vota a gobernadores y legisladores nacionales.

Los migrantes son recibidos en la estación de autobuses de la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey en Manhattan, donde les ofrecen alimentos, agua, ropa, pañales, atención médica y asesoramiento legal.

Grannies Respond (Abuelas Responden), que recientemente denunció la llegada de vuelos desde Laredo (Texas) a Sacramento (California, oeste) con migrantes hasta descalzos, reparte alimentos e información legal y sobre refugios en Nueva York a los inmigrantes, que en muchos casos no hablan inglés.

Decenas de esos recién llegados atravesaron a pie la selva del Darién, una extensa región en la frontera entre Panamá y Colombia, sufrieron penurias y vieron la muerte de cerca en el viaje de miles de kilómetros desde América del Sur hasta la frontera con México.

Para el año próximo y para 2024, Nueva York destinará 5 millones de dólares para pagar a abogados que asesoren a los migrantes, y abrirá al menos dos centros humanitarios de respuesta inmediata para aliviar la carga en los refugios.

«Hace más de 100 años, la isla Ellis [Nueva York] abrió sus puertas para acoger a quienes «anhelaban respirar libres» (…) Mientras otros dirigentes han abdicado de su deber moral de apoyar a los solicitantes de asilo que llegan, la ciudad de Nueva York se niega a hacerlo», dijo el alcalde Eric Adams al anunciar la medida.

Pero no solo las ONG cargaron con la responsabilidad de ayudar a los migrantes.

Miles de ciudadanos dejan diariamente kilos de ropa y alimentos en donaciones en lugares como el Museo de Brooklyn, uno de los barrios de Nueva York, que hizo un llamado urgente por productos de higiene, ropa para niños y adultos, pases de metro, cargadores de celulares, entre otros elementos. (Con información de Sputnik). 

Acerca de El Pulso

Propósito: Somos un equipo de investigación periodística, que nace por la necesidad de generar un espacio que impulse la opinión sobre los temas torales de la política, economía y la cultura hondureña. Estamos comprometidos con el derecho que la gente tiene de estar verdaderamente informada.

Derechos Reservados 2019-2021