TEGUCIGALPA, Honduras
Las irregularidades en el contrato suscrito entre el Estado y el consorcio de capital colombiano Empresa Energía Honduras (EEH) podrían convertirse en un pesado lastre para las debilitadas finanzas en el sentido que se fraguó una trama conspirativa con las autoridades del gobierno anterior, lo que terminaría beneficiando al operador privado, de acuerdo a varios hallazgos de Cuarto Poder y El Pulso.
Hasta ahora, las demandas contra el estado (que ascienden a tres) alcanzan los cuatro mil 500 millones de lempiras y las mismas habrían sido creadas a propósito para favorecer a la compañía suramericana que, hasta la fecha, no ha cumplido a cabalidad el contrato de concesión que empezó a operar en 2016, precisamente, en el primer mandato del extraditado Juan Orlando Hernández y que finalizará en 2023, por lo que podrían incrementarse en el transcurso de los próximos meses.
En las investigaciones de Cuarto Poder y El Pulso se destaca que, hasta la fecha, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) poco o nada ha hecho en cuanto a la intervención del contrato que inició en septiembre de 2021 y finalizará en septiembre próximo, lo que obligaría a la Superintendencia de las Alianzas Públicas y Privadas (SAPP) a extenderlo por unos seis meses más. Una persona conocedora del tema (que solicitó no ser mencionada para evitar represalias) afín a la estatal, dijo temer que la ENEE no pudiera asumir el ciento por ciento de las operaciones en poder de EEH a pesar que ya está por finalizar la intervención, lo que implicaría la inminente extensión del proceso, mismo que se extendería hasta marzo de 2023.
Adelantó que la SAPP se aprestaría a dar por finalizado el contrato suscrito con el consorcio colombiano, aunque habrían algunas trabas, entre ellas, que el sistema de gestión comercial -encargada del sistema de facturación, recolección de dinero, circuitos de distribución, entre otros- sería la piedra de tropiezo para anular el convenio. Según el informante, el sistema, denominado inCMS que fue adquirido mediante un préstamo del Banco Mundial, en la actualidad se encuentra tercerizado a través de un operador externo que pertenecería al operador privado.
Según el experto que consultaron ambos medios, la empresa Soluciones Globales es la que gestiona inCMS, en consecuencia, se convierte en una traba difícil de superar para el Estado porque se encuentra tercerizado. La condición para que las partes den por finalizado el contrato de concesión es que no exista una tercerización de cualquier servicio. En otras palabras, EEH buscará todos los medios posibles a fin de que su concesión finalice hasta el segundo semestre de 2023 tal como lo establece el convenio.
ASÍ SE CREÓ EL CONSORCIO EEH. Datos que fueron públicos en su momento, dan constancia cómo se creó esa empresa que fue destinada a enriquecer a particulares, en una forma clara de privatización de los servicios de medición, se enajenaron las funciones que tenía la ENEE de distribución y control y reducción de pérdidas, tanto técnicas (equipo en mal estado) y no técnicas (hurto y robo de electricidad).
El surgimiento de EEH se concretó el 14 de diciembre de 2015, siete meses antes de la entrada en operaciones, cuando el notario responsable de la constitución de la sociedad fue Cristian Medina Sevilla, quien tendría fuertes nexos con altos dirigentes del Partido Nacional. De acuerdo a las informaciones publicadas meses después de que esa empresa comenzara a operar, compareció el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), Miguel Aguilar y la excomisionada de la Comisión para la Promoción de las Alianzas Públicas y Privadas (Coalianza), Zonia Morales. Asimismo, participaron el exgerente de la estatal Jesús Mejía y un representante de un banco que participa como administrador del fideicomiso.
Entre los principales socios se encuentra el STENEE, la empresa colombiana Eléctricas de Medellín SAS, quien aportó alrededor de 213 millones 850 mil lempiras; en otras palabras, se convirtieron en los mayores accionistas con el 47 por ciento. En tanto, otra de las empresas denominada Interprise Consulting, SA también entregó en capital unos 186 millones 550 mil lempiras. En otras palabras, la compañía entregó el 41 por ciento.
Los otros accionistas, entre ellos, el STENEE, dio 36.4 millones y Unión Eléctrica contribuyó con 18.2 millones de lempiras. Además, se prevé un punto denominado honorario de éxito por cada punto de pérdidas que se reduzcan y a pesar que no se cumplió, no significaría problemas para el proveedor privado.
PÉRDIDAS DE HASTA 25 POR CIENTO. Un informe de la oenegé Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) indicó que «las pérdidas de energía eléctrica en Honduras figuran entre las más altas de la región latinoamericana y causan un impacto negativo en la economía, el funcionamiento y el desarrollo del país». Según se constató, «entre 1998 y 2018, Honduras registró en promedio pérdidas de energía del 25 por ciento cada año. Esas pérdidas de energía rondan los 231.5 millones de dólares por año, representando un total de más de 4 mil millones de dólares en pérdidas monetarias en 20 años».
La entidad estimó que las pérdidas (tomando como base 2017) «superan los presupuestos de Defensa y Seguridad para ese año; casi igualan al presupuesto de Salud y la mitad del presupuesto de Educación. Las pérdidas de un solo circuito en 2019 representan una cantidad monetaria suficiente para que Estado contrate a 643 médicos, 1,800 enfermeras o enfermeros, o 1,800 maestros».
«El claro impacto negativo a las finanzas del Estado va más allá de lo que las pérdidas representan monetariamente. Primero, este mal manejo a menudo resulta en el incremento de los costos de la tarifa de energía en nuestro país, que significa que el pueblo termina pagando por la mala administración. Segundo, esto tiene un impacto en el nivel de inversiones en el país. Los inversionistas usualmente requieren de un buen servicio eléctrico a buen costo», según consta el informe que puso en evidencia el fracaso en la gestión del consorcio.
BANCO PROTEGE A EMPLEADO QUE DIO CERTIFICACIÓN A EEH. Cuarto Poder y El Pulso supieron que una entidad financiera nacional mantiene protegido al empleado (que no forma parte de los equipos de decisión) que entregó una certificación a EEH respecto a la deuda que mantiene la ENEE con el consorcio.
Esa persona, de acuerdo a lo indagado, todavía sigue laborando en el banco y a la fecha no ha sido sometido a procedimientos disciplinarios por el hecho de haberse saltado los lineamientos establecidos.
Y es que el sindicado, procedió a entregar a Energía Honduras un documento sobre la deuda que mantiene la ENEE, por lo que ese instrumento se volvió una especie de documento legal que usa EEH para proseguir con los procesos legales contra el Estado.
Tal papel, según consultas, tuvo que ser entregado por el contador general, pero eso jamás ocurrió, El empleado habría actuado por su propia cuenta a fin de beneficiar a la compañía colombiana.
A pesar de estos antecedentes, la Comisión de Energía del Congreso Nacional ha hecho la vista gorda a sabiendas de que EEH podría ganar el contencioso en los tribunales.
