TEGUCIGALPA, Honduras
Durante el foro Estado de país: Honduras 2022 la Asociación por una Sociedad más Justa (ASJ) detalló que la falta de independencia en los poderes del Estado y el financiamiento ilícito de las campañas políticas representan los desafíos de la democracia.
Al respecto, el director de transparencia de la organización Lester Ramírez, indicó que «el cambio de gobierno y del Congreso Nacional generó esperanzas para la democracia, pero que los retos son enormes y la población demanda resultados inmediatos».
Precisó que «en las elecciones generales del 28 de noviembre, los jóvenes y los indecisos fueron clave en el triunfo de Xiomara Castro porque aplicó el voto de castigo al Partido Nacional (quien gobernó por 12 años con varios actos de corrupción cometidos por sus líderes)».
Externó que «no volver a permitir que ninguna persona, partido político u organización política llegue a concentrar el poder, debe ser el rol como ciudadano. La democracia hondureña está en cuidados intensivos, pero que la transición política es una oportunidad para su recuperación».
Apuntó que la democracia hondureña cayó a 5.10 por ciento en 2021, una caída de 0.82 por ciento desde 2016, pero con el cambio de administración, Honduras ascendió a un 47 por ciento en el índice de libertad, citando datos de la organización Freedom House.
El informe de la ASJ indicó que dos de cada 10 hondureños durante el 2020 estaban satisfechos con la democracia.
Agregó que solo el 13.4 por ciento tenía confianza en el expresidente, Juan Orlando Hernández (extraditado a EE.UU. por delitos de narcotráfico) 12.3 por ciento en el Congreso Nacional y 13 por ciento en el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según el escrito «el índice de Independencia Judicial (WEF), Honduras cayó de 3.76 en 2012 a 2.66 en el 2017, que fue el último año medido. Para este año, Honduras se encontró en el lugar 121 de 137 países incluidos en el estudio. Luego de 2017 han pasado una serie de eventos que plantean la pregunta de si Honduras habrá declinado más en los años posteriores».
Apuntó que «varios casos emblemáticos ilustran esta falta de independencia, incluidos: la destitución de los magistrados de la corte en 2013, las variantes declaraciones de (in)constitucionalidad de las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (Zedes) y la interpretación de la Sala Constitucional que abrió el camino a la reelección presidencial», del exmandatario Hernández en el 2017.
«Además, Honduras ha tenido severas debilidades en los procesos de selección de altos funcionarios incluidos el fiscal general y más recientemente el procurador general de la República», acotó.
