TEGUCIGALPA, Honduras
La titular de la Secretaría de Finanzas Rixi Moncada reveló que la administración del exmandatario Juan Orlando Hernández saqueó 168 mil millones de lempiras de las arcas del públicas.
Detalló que durante la última administración se aprobaron decretos y contratos con gran impacto en las finanzas al tiempo dijo que más de 400 millones fueron sustraídos un día antes de la toma de posesión de la presidenta Xiomara Castro para beneficiar a altos funcionarios de confianza del gobierno de Hernández.
Señaló que debido al desvío de fondos que se realizó a través de programas sociales como Vida Mejor que fueron avalados por la Secretaría de Finanzas encontró una “caja vacía», presupuesto falso y una fuente de corrupción enorme.
“Más de 168 mil millones de lempiras fueron desviados durante 12 de dictadura a través de la red de corrupción que endeudó y saqueó los fondos públicos; Honduras es un despojo», afirmó.
Indicó que el Presupuesto General de 2022 es falso, puesto que no se parece a lo que ella encontró en las arcas.
Dijo que han encontrado varios indicios de corrupción por todas partes, no solo en las asignaciones hechas a las instituciones, sino en los contratos y fideicomisos que otorgó el Estado.
“Este presupuesto es falso, no refleja la verdad y es fuente de corrupción; porque manipuló cifras, incluyó programas y proyectos sin estudios ni financiamientos y no cabe ninguna duda que fue elaborado de manera descarada con conocimiento que a partir del 27 de enero iniciaba la nueva administración que requería de su propia partida presupuestaria para el desarrollo de su plan de gobierno”, apuntó.
Externó que el déficit del presupuesto del 2022 ronda en el 35 por ciento, eso sin incluir la deuda histórica y flotante de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).
Precisó que de los 179 mil millones de lempiras requeridos para la administración centralizada, el Estado proyecta recaudar 127 mil millones y de esos fondos, una parte es para el pago de la deuda incluidos los 12 mil millones de lempiras de la deuda flotante tiene la estatal eléctrica .
“Ocupamos endeudarnos en 64 mil millones de lempiras, o sea, más de 2 mil millones de dólares para poder cubrirlo; estamos hablando de los 10 meses que quedan pasando febrero”, declaró.
Agregó que de “64 millones 500 mil lempiras transferidos en fideicomisos solo el diez por ciento están registrados en inversión. El fideicomiso del Instituto de la Propiedad (IP) es el más perverso e ilegal. No registra ninguna operación».
En cuanto a las aportaciones público-privadas dijo que son una desgracia de este país; «parte del modelo de corrupción».
