TEGUCIGALPA, Honduras
Bien vista por actores políticos resultó la instrucción de la presidenta electa, Xiomara Castro, de que fuesen removidas las vallas perimetral que rodeaban las instalaciones del Congreso Nacional y se abrieran las puertas a la población hondureña.
Tras la juramentación de la directiva del Poder Legislativo encabezada por Luis Redondo, sin la presencia del secretario de Gobernación, la ciudadanía que se mantenía en las afueras ingresó paulatinamente a los espacios del hemiciclo hasta que alcanzó el salón central.
Allí pudieron sentarse en las mismas sillas que los diputados e incluso subieron al estrado principal, algo de lo que dijeron sentirse agradados porque no había sido posible en gobiernos anteriores.
«En los años que yo tengo, nunca se nos dejó entrar ni siquiera al área de gradas, que fue construida para el público y los medios de comunicación», contó el diputado de Libertad y Refundación (Libre), Juan Barahona.
Mencionó que, más bien, los visitantes fueron reprimidos en muchas ocasiones e, incluso, una vez las fuerzas de seguridad pública lanzaron gas a los propios parlamentarios.
Expuso que en esta ocasión las personas entraron y se mantuvieron tranquilas, conviviendo en una manera organizada y sin cometer daños al inmueble.
«Es el pueblo consciente que sabe que la institución es del pueblo y, si es así, todos tienen la obligación de cuidarla», apuntó.
Además, garantizó que durante la nueva administración la apertura en la cámara legislativa será permanente, lo que también significa -acotó- una apertura a la democracia.
«Que el pueblo sienta que está en el poder, que el gobierno que está le corresponde, porque es con su voto que hemos llegado al Congreso Nacional y Xiomara Castro a la presidencia de la República», expresó.
El exaspirante a designado presidencial de Libre, Lucky Medina, comentó que la población tiene el poder y la legitimidad para entrar sin problemas a las instalaciones.
«Campesinos, obreros, jóvenes, amas de casa, jubilados, profesionales, desempleados, colectivos de barrios y presos políticos, aquí cabemos todos y todas», describió.
La diputada por el Partido Salvador de Honduras (PSH), Suyapa Figueroa, también externó su alegría porque la gente pudo entrar al área que quisiera dentro del Congreso.
«Me encantó ver al pueblo tomar posesión de nuevo de lo que le pertenece. ¡Avanzamos a la recuperación de la patria», dijo.
Fue el sábado por la noche que la gobernante electa giró la instrucción a la Policía que removiese las vallas con el propósito de que los hondureños ocupasen «el lugar que les corresponde».
