TEGUCIGALPA, Honduras
Un total de tres propuestas para acabar con la incertidumbre que dejó la conformación de dos juntas directivas para el Congreso Nacional de Honduras compartió este lunes el analista político Julio Navarro.
Expuso que se requiere una solución de carácter político ya que en el país ha existido una tradición de que los problemas políticos se resuelvan en las instancias judiciales.
«No podemos seguir judicializando la política. Hay que obligar a los políticos a que pongan soluciones», expresó.
CONSENSO INTERNO. Planteó que una forma es a través de un diálogo interno entre la bancada de Libertad y Refundación (Libre), que tiene ahora 32 diputados, y los 18 congresistas que fueron expulsados de la entidad.
«Tanto los unos como los otros son diputados legítimos de Libre que fueron electos por su gente. Son personas que, se conoce, han luchado, han peleado y han puesto en peligro sus vidas», describió.
TERCERÍA. Si no hay un acuerdo entre ellos -ilustró- el designado presidencial electo, Salvador Nasralla, podría proponer a otra persona, ya que a él le corresponde según el acuerdo firmado entre Libre y el Partido Salvador de Honduras (PSH).
Explicó que podría ser una salida factible ya que los parlamentarios disidentes han expresado que no están de acuerdo con la designación de Luis Redondo.
«Hay que tocarles la consciencia a ver si eso es», acotó Navarro.
LLAMADO A DIÁLOGO. Indicó que una tercera opción, si los dos primeros planes fracasan, sería la búsqueda de un diálogo inter-partidario en favor de Honduras.
«Los hondureños fueron a votar masivamente porque creyeron que con eso se resolvía el problema y no podemos enredar las soluciones del país», afirmó.
«Los que buscan más impunidad y consolidar su corrupción deben entender que este país no da para eso, la gente está en las calles apoyando unánimemente la posición de Xiomara, que es cumplir los acuerdos. La gente reclama que se cumpla la palabra», profundizó.
¿QUÉ DIRECTIVA PREVALECERÍA? El también experto en sociología valoró que si ninguna de las ideas descritas funciona, la junta directiva que preside Jorge Cálix morirá por extinción.
Argumentó que ese grupo de autoridades no podría sostenerse sin un vínculo con la presidenta electa Xiomara Castro ya que es ella quien sanciona y publica los decretos, además de que se encarga de distribuir el presupuesto necesario.
Dijo que Cálix podría tomar el mismo camino que el líder opositor venezolano Juan Guaidó, pero con la diferencia que en Honduras el apoyo de la comunidad internacional está dirigido hacia el gobierno que lidera Xiomara Castro «por la enorme cantidad de gente que fue a votar».
Asimismo, Navarro externó que no ve futuro en posibles alianzas de Cálix y su bancada con los nacionalistas y liberales.
Señaló que la bancada de los disidentes es minoritaria y no podría, como dijo Cálix, cumplir todas las promesas que hizo Libre si el Partido Nacional, que ahora tendría mayoría, les retira el apoyo mostrado a la hora de elegir la cúpula directriz del hemiciclo.
