TEGUCIGALPA, Honduras
Qué se haga una repetición parcial de la elección general en la municipalidad de Concepción, Intibucá, pide el novel partido Liberación Democrática de Honduras (Lidehr) en su búsqueda de mantener posibilidades de supervivencia.
Tras una apretada contienda, el aspirante a alcalde por el Partido Nacional, Wilmer Santos, se impuso, con el 100 por ciento de las actas escrutadas, por 116 votos a Pablo Laínez, dejándolo sin la posibilidad de ser el único candidato electo por Lidehr en los comicios.
Sin embargo, los representantes de la agrupación derrotada denuncian que hubo trampa por parte de los cachurecos en su afán de consumar la reelección y sostener el poder en el territorio.
«Con nuestros abogados hicimos la petición para que se anulen algunas urnas en las que nos hicieron fraude. Tenemos evidencias concretas, tenemos un video, pero sentimos que no somos tomados en cuenta. Exigimos al Consejo Nacional Electoral (CNE) que haga las correcciones que pedimos», expresó Laínez.
Apuntó que estuvo pendiente semana a semana del sistema del órgano electoral cuando él iba ganando -aunque por un pequeño margen- que fue por casi todo el escrutinio.
Reconoció que ya tenía las actas y sabía que al final perdería de acuerdo a los cómputos, empero, aseguró que la anomalía radica en la transcripción de la cantidad de votos en las juntas receptoras de votos (JRV), en las que se habría fraguado una manipulación.
Es por ello -mencionó- que presentaron tres impugnaciones ante el CNE; sin embargo, denunció que allí solo tomaron en cuenta una, verificando nada más tres de las 23 actas en las que se detectó inconsistencias.
Subrayó que en las papeletas que sí examinó la autoridad electoral se evidenció que hubo intención de cambiar la voluntad popular expresa en las urnas.
Cuestionó que el CNE no haya decidido ver todas las actas que denunciaron, pese a que Concepción es un municipio pequeño y lo harían «en una hora» y no «semanas tras semanas como se estuvieron con el departamento de Cortés».
«Quizá actúan así porque este es un partido pequeño, aunque solo lo es en nombre. Somos gente responsable y nuestro pueblo anhela un cambio. La gente está desesperada, a cada rato nos llaman y quieren conocer los resultados concretos», arguyó.
En tanto, el presidente de Lidehr, Lempira Viana, denunció en una entrevista concedida a El Pulso que la gente afín al candidato nacionalista hurtaron tres urnas y de las mismas no hay acta de cierre, por lo que solicitan que se repita la votación.
Señaló que tiene evidencia documental y testimonios sobre la manipulación de las elecciones habría hecho el nacionalista Santos, quien lograría la reelección.
«Ni siquiera cerraron las actas, se fueron con las urnas», aseveró, acotando a su vez que un hermano del edil fue partícipe de la acción.
«Pedimos no el recuento de votos, sino que vayamos a elección nuevamente de esas tres urnas que están abiertas y no tienen acta de cierre. Solicitamos que se vuelva a hacer el proceso porque nos asiste la ley», declaró.
Detalló que Lidehr tiene las copias de las actas y se refleja que no tienen siquiera las firmas de los responsables de mesas y, a pesar de ello, el CNE las habría procesado sin atender la impugnación que presentaron con el propósito de que se abran las urnas.
En tal sentido, Viana dijo que si el pleno del CNE hace la declaratoria oficial de los resultados antes de resolver la reclamación -y las de otros candidatos- incurrirían en un delito.
Por lo que, confió a este medio que al nomás hacerse la declaratoria se personarán al Ministerio Público para interponer la denuncia, acusando a los consejeros de la comisión de dos delitos.
«Sería por abuso de autoridad y violación a los deberes de los funcionarios. No pueden dar una declaratoria mientras el proceso no esté culminado al 100 por ciento», dijo.
No obstante, reconoció que los consejeros están contra la espada y la pared ya que deben hacer el anuncio debido al límite de los tiempos, pero también se arriesgan a hacerlo con impugnaciones sin resolución.
Por otro lado, Viana indicó que harán otra denuncia ante la Fiscalía General pero dirigida a quienes estarían involucrados directamente en el alegado fraude ya que las actas son un documento público que no puede ser manipulado por personas no designadas para ello.
«No nos vamos a agachar. Vamos a ir a instancias internacionales de ser necesario, pero no vamos a agacharnos y tolerar», sentenció.
