TEGUCIGALPA, Honduras
La Policía Nacional informó que las cifras de homicidios en Honduras aumentaron en un 6.5 por ciento entre enero y septiembre de 2021, en comparación con el mismo periodo de 2020.
En consecuencia, se registra un crecimiento que ya superó la barrera de los dos mil 700 casos.
En 2020 hubo una reducción de 586 homicidios respecto a 2019, pero se registró el año pasado un promedio de 37 crímenes por cada 100 mil habitantes, una tasa que sigue siendo muy alta para una nación que no vive una guerra interna.
En el informe de 2021, el mes más sangriento en el periodo de referencia fue junio, con 382 homicidios, y el menos violento fue agosto con 266.
La media diaria de asesinatos en Honduras durante el periodo de referencia fue de 9.95, mientras que en los primeros nueve meses de 2020 llegó a 9.35.
De acuerdo con cifras oficiales, el año pasado se registraron en Honduras tres mil 496 homicidios, un 14.3 por ciento menos que en 2019, cuando totalizaron 4,082.
Uno de los principales problemas de Honduras, uno de los países de la región utilizado para el paso de la droga que llega de Suramérica con destino a EE.UU., es la violencia causada por el crimen organizado y el narcotráfico.
Las muertes violentas en el país son atribuidas en mayor grado al crimen organizado y las pandillas conocidas como «maras», que pelean territorios para el narcotráfico al menudeo y el cobro de extorsiones.
Un factor que contribuye a la violencia en Honduras es la alta impunidad, a lo que se suman la evolución de las bandas criminales, según autoridades y organismos de derechos humanos.
