TEGUCIGALPA, Honduras
El candidato del Partido Nacional, Nasry Asfura, pidió a sus leales no confiarse, pues reconoce que no tienen asegurado un nuevo triunfo en las elecciones generales de noviembre que les permita continuar al frente del Ejecutivo.
Calificado como el candidato silencioso por sus escasos discursos y participación en medios de comunicación, Asfura fue enfático en su corta intervención que no tienen asegurado ganar las generales.
“No tenemos nada ganado, absolutamente nada ganado; el 28 de noviembre tenemos que ir a votar y demostrar como partido que amamos la democracia, que somos un país con democracia”, instó.
Papi a la Orden, como también se le conoce, arguyó que es un político diferente, quizás queriendo aparentar una imagen contraria a los candidatos del oficialismo en otros periodos, al tiempo que prometió “servir a Honduras”.
“Soy diferente a cualquier político de décadas atrás, me he dedicado al trabajo, sé lo que se necesita y con todo mi amor, cariño y esfuerzo; partirme el corazón, alma y cuerpo para servir mientras Dios nos dé salud y demostrar que sí podemos ayudarle a la gente, sí podemos servir”, declaró.
Añadió que “es diferente” y no busca “la foto o los abrazos” de sus simpatizantes sino demostrar que “con trabajo y unidos todos los hondureños podemos sacar a Honduras adelante”.
“TRABAJO Y MÁS TRABAJO”. Sin detallar su plan de gobierno, Asfura prometió generar fuentes de trabajo en medio de una sacudida general por la puesta en marcha de los regímenes especiales de desarrollo promovidos por el gobernante Juan Orlando Hernández.
“Dejemos nuestro orgullo y los resentimientos, tenemos que trabajar por una Honduras más grandes, porque solo nosotros los hondureños podemos sacar adelante a nuestra querida Honduras con mucho trabajo y más trabajo”, arguyó.
En su visita a El Progreso, situada a 230 kilómetros al norte de la capital, sostuvo que “está firme para trabajar y servir a Honduras”.
“Aquí nacimos, aquí vivimos y aquí vamos a morir; solo nosotros los hondureños vamos a poder sacar adelante a Honduras”, dijo.
LEJANO A LOS DEBATES. El candidato del oficialismo se refirió a su poca participación en medios de comunicación y sus escasos discursos de cara a las elecciones.
“No son con insultos, con malos tratos, peleándonos unos con otros, sino dar un buen ejemplo de trabajo. Sabemos lo que siente la gente, lo que quiere la gente, no es un debate en la televisión e ir a decir que va a hacer una cosa y otra”, sostuvo.
