TEGUCIGALPA, Honduras
El analista Olban Valladares sostuvo que la instalación de las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (Zedes) son falsas esperanzas de desarrollo.
“Son improcedentes, las Zedes se les ha vendido a los incautos como propulsores mágicos de un desarrollo nacional completamente falso”, señaló.
Aseguró que “los grilletes que nos pretenden poner no sólo en los tobillos para inmovilizarnos, sino también en la mente, son los peores que hay, se quiere dominar la mente de un pueblo no tiene esperanzas de poder salir adelante”.
Para Valladares, la puesta en operación de las regiones especiales son “una maquinación perversa como la de la reelección en 2017; todo el mundo sabía que la violación de la Constitución al haberse hecho las reformas de forma inconstitucional, violando totalmente la regla más superior del país iba a traer serias consecuencias y ahora vemos los resultados”.
“Entonces no nos extrañemos lo que está pasando, comieron miel del panal; se la comieron en 2017 porque vieron que las cosas eran fáciles», añadió.
El experto explicó que «cuando un partido autoritario y un gobierno autoritario logran dominar los demás poderes del Estado de manera tan flagrante, burda y vulgar, cuando se domina una fiscalía y esta entra en un silencio absoluto para no pronunciarse de ninguna manera, ni siquiera dar una opinión como la ha dado en otros casos políticos en que se aprestan a dar declaraciones, cuando les ponen un micrófono enfrente de la boca son expertos en declarar, criticar y todo y ahora guardan silencio”.
Agregó que los representantes del gobierno designados para defender la instalación de las Zedes ante la prensa son un grupo de “novatos que pienso que pasaron por la Universidad, pero la Universidad no pasó ellos, fácilmente son debatibles y sus argumentos no convencen a nadie”.
Invitó a la población a tomar acciones antes de que sea tarde.
“Aquí lo que debemos de hacer como hondureños es desplegar, si ya no puede ser el Estado, son las organizaciones educativas, las universidades, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada y las cámaras de comercio es desplegar una campaña internacional, para advertir aquellos supuestos grandísimos inversionistas que van a traer esas fabulosas e increíbles empresas que le dan empleo a más de un millón de habitantes en Honduras, sobre la violación que se comete en nuestro territorio”, dijo.
Para finalizar, dejó claro que la instalación de las Zedes no es una respuesta a la falta de empleo ni una medida de combate al subdesarrollo.
“Ni siquiera la maquila en treinta años ha podido generar más de 170 mil empleos al sector popular, entonces cómo se espera que las Zedes sean una respuesta, porque creo que esto está orientado más que todo a vender propiedades para residencias, no en fábricas”, puntualizó.
