SAN FRANCISCO, EE. UU.
Realizar el «acompañamiento» en su tránsito por el corredor migrante de Centroamérica y bajo las mejores condiciones humanas», es el objetivo de un plan de acompañamiento y protección a migrantes que están trabajando los países de la región en coordinación con la Organización Internacional de las Migraciones (OIM).
La noticia se da a conocer luego que la Alta Comisionada Adjunta de las Naciones Unidas para los Refugiados, Kelly Clements, realizará una gira por algunos de los países que de tránsito de los movimientos migratorias.
En su cuenta de Twitter, Clements escribió que para que los migrantes tengan una integración exitosa “requiere apoyo desde el primer momento que las personas llegan al país”.
Algo en lo que coincide Jorge Peraza, jefe de Misión para los países del norte de Centroamérica de la OIM.
Peraza, quien fue citado por medios locales panameños e internacionales como Actualidad RT, ha asegurado que el plan de «coordinación común» entre los países de Centroamérica busca «reducir al máximo la violación de los derechos humanos y particularmente combatir, en alguna medida, las situaciones de tráfico ilícito de migrantes y de trata de personas».
El jefe de misión también explicó que una comisión integrada por directores de migración ha estado analizando desde principio de año la manera de alinear el trabajo.
Tal y como lo han hecho en el pasado Panamá y Costa Rica “establecido criterios de coordinación entre las autoridades migratorias».
La OIM en el documento Evaluación de Sitios de Alojamiento y Estación de Recepción Migratoria menciona que pese a la pandemia por COVID19, el flujo de personas migrantes entre Costa Rica y Panamá ha continuado de manera regular y de manera irregular.
Las iniciativas para atender a los migrantes y dotarlos de garantías no son nuevas, a inicios de 2021 los países del Triángulo Norte suscribieron una declaración regional que busca una migración segura, ordenada y regular, así como reforzar el combate al tráfico ilícito de personas migrantes y la trata de éstas.
En el documento, los países participantes, condenaban el tráfico de personas y reafirman el cumplimiento de las leyes y de las medidas de bioseguridad para verificar la salud de los migrantes y de sus conciudadanos frente a la pandemia del COVID-19. (VOA).
