TEGUCIGALPA, Honduras
La exjueza de sentencias Indiana Beatriz Castellanos, quien fue ejecutada por sujetos desconocidos y cuyo cuerpo fue hallado en la colonia Roble Oeste, al sur de la capital, abordaba algunos casos denominados de alto impacto como la causa denominada Pandora.
De hecho, la exfuncionaria judicial y el también fallecido exjuez penal Melvin Bonilla -ultimado en marzo anterior- eran apoderados legales de varios acusados de la sustracción de alrededor de 282 millones de lempiras de la Secretaría de Agricultura para el financiamiento de campañas políticas.
Varios factores en común unían a ambos penalistas, entre ellos, que formaron parte del sistema judicial, trabajaron con sindicados en la controvertida causa y fueron asesinados en circunstancias que deberán ser esclarecidas por las autoridades.
El Colegio de Abogados de Honduras emitió un pronunciamiento en torno al deceso de la reconocida exjueza; en una nota luctuosa indicó que «el gremio de profesionales del derecho se une al dolor de los familiares y amigos de la distinguida abogada Castellanos Barahona».
Según el informe presentado por el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), hasta 2020 hubo alrededor de 161 crímenes contra abogados, cifra que ha ido en ascenso por el asesinato de Bonilla, Carlos Vallejo y se suma el de Castellanos.
El titular de la Dirección Policial de investigaciones (DPI), Rommel Martínez, comentó que se están agilizando las pericias entorno a la muerte de la exservidora judicial y esperan tener una línea de investigación dentro de 24 a 48 horas.
El móvil que produjo el asesinato de la togada aún genera dudas y se espera que en los próximos días se den avances respecto al fatal hecho.
Es necesario señalar que Castellanos fungió como jueza en la La Ceiba y Tela.
Según registros oficiales, las ciudades del país con mayores incidencias de homicidios de abogados se dan en Tegucigalpa y San Pedro Sula.
