Honduras observa con mucha preocupación el acercamiento de Guatemala y otras naciones de la región centroamericana al ser considerados socios importantes en el proceso de buscar reducir las migraciones irregulares en la frontera sur de Estados Unidos.
Sin embargo, los constantes llamados para buscar mecanismos que minimicen las migraciones y la corrupción no están alcanzando a Honduras, desde donde, en los últimos años, se han originado la mayoría de las caravanas de migrantes.
Mientras Ricardo Zúñiga, designado por Estados Unidos como Enviado Especial para el Triángulo Norte fue claro al advertir que la clave está en impulsar la cooperación de los que reconoce como países socios que están comprometidos con el estado de derecho y sobre todo la lucha contra el crimen organizado, el analista y excanciller Roberto Bermúdez dice que el país queda comprometido por su débil estrategia contra la corrupción.
“Hoy en día nadie debe esta opuesto a que exista transparencia reducir la corrupción en estos países permitirá una nueva forma más eficaz de gobernar, es necesario ver cómo nos relacionamos con la fuerza de tarea”, dijo Bermúdez.
Sin embargo, agregó que “el país debe aprovecharlos. No es solo una vía, hay programas que Honduras tiene que desarrollar para tener instituciones sólidas, es una oportunidad para cambiar el panorama y esto frenará las migraciones”.
Por su parte, el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, reiteró que su compromiso es claro en la lucha contra la corrupción y el narcotráfico, tarea que según dijo llevará hasta el final de su mandato y afirmó que Estados Unidos es en este escenario un socio clave.
“Yo continuaré con esa alianza hasta que deje el cargo. Con socios como Estados Unidos, Colombia, entre otros, logramos ese resultado de bajar en un 95% el paso de la droga. No son cifras mías, son las cifras de Washington, el gobierno de Estados Unidos, ningún otro país tiene resultados así”, dijo el mandatario.
En las últimas horas una nueva caravana de migrantes salió de Honduras con al menos 150 a 200 personas que buscan llegar a Estados Unidos de manera irregular, a pesar del cierre de fronteras decretado por Guatemala para frenar su avance. (VOA Noticias).
