Unos cuatro médicos perdieron la vida en las últimas 24 horas cuatro a causa del SARS-CoV-2, sumando ocho los galenos fallecidos solo en lo que va de 2021 mientras dos se encuentran hospitalizados en terapia intensiva.
Las primeras víctimas del gremio médico de este año son Raúl Zelaya Rodríguez, quien viajó a México para visitar a su hijo; resultó infectado, por lo que fue hospitalizado en un centro asistencial de ese país donde murió el pasado 3 de enero.
Ese mismo día se confirmó el deceso del doctor Marco Tulio Martínez quien era el fundador y director del centro médico Medicasa que opera en Comayagüela.
En tanto, el pasado 9 confirmó el deceso del ortopeda Carlos Castillo, quien residía en San Pedro Sula.
El 22 de enero moría Arquímedes Rodríguez mientras era atendido en el hospital del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) donde laboró por varios años.
Solo este fin de semana tres galenos perdieron la batalla a causa del patógeno: Raúl Pérez originario de Comayagua, pero laboraba en La Mosquitia; Miguel Ángel Paz, quien estaba asignado en la región norte del país y el patólogo Edgardo Murillo, un reconocido docente de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
En tanto, este lunes se confirmó la muerte de Alma Umaña, asignada al hospital regional del IHSS de San Pedro Sula.
Cabe señalar que entre 2020 y 2021 van 63 galenos víctimas del nuevo coronavirus; hasta el 25 de enero ya suman ocho mientras que en 2020 hubo 55.
La presidenta del Colegio Médico de Honduras, Suyapa Figueroa, lamentó que sigan falleciendo sus colegas mientras los hospitales públicos se encuentran colapsados sin una posible vacuna y el gobierno siga apostando por la economía, en perjuicio de la salud.
“Hoy lamentamos nuevamente la muerte de colegas y aún no tenemos ni cupos en cuidados intensivos, ni hospitales y mucho menos esperanza de vacuna. Los dueños del país no pueden dejar que sus negocios sigan perdiendo. BASTA… el personal ya no da más (sic.)”, expresó.
Por su parte, la dirigente del gremio, Ligia Ramos, reaccionó molesta ante la indiferencia de la población para evitar la propagación de la enfermedad.
“Nosotras ya no podemos más, con mucho pesar, pero ya no aguantamos, y a nadie le importa… Creo q tendrán que acudir a los futbolistas, políticos, funcionarios públicos, empresarios, para que los atiendan les resuelvan sus problemas de salud (sic.)”, reaccionó.
