La apertura «inteligente» de empresas no ha sido del todo aceptada ya que los casos positivos por covid-19 cada día van en aumento, pero por otro lado, el hambre y el desempleo ha sido otra «pandemia» que no ha podido resolver el gobierno.
Más de 50 días se han detenido las empresas en trabajar y ante la falta de ingresos, los contratos de los empleados han tenido que ser suspendidos de manera temporal.
En ese sentido, la apertura de manera gradual mediante una prueba piloto ha sido una de las soluciones. Algunos consideran que en este tipo de decisiones no se ha tomado en cuenta a personas especialistas que guíen al gobierno para determinar si es viable o no.
«Cuando hablo de apertura inteligente, incluye un análisis de los departamentos, ciudades y sectores productivos que están ubicados en esas zonas. Hay ciudades que no tienen un indice de contaminación, si esas condiciones se dan se puede movilizar a las personas», aportó Jose Luis Moncada, expresidente de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS).
Un aporte solidario ha sido otro de los acuerdos entre el sector privado y el gobierno que apoyará al trabajador con una mensualidad por tres meses. Esta medida fue aprobada en la Ley de Auxilio a los Sectores Productivos y a los Trabajadores.
Entre los requisitos será que las empresas deben justificar los motivos por las cuales no pueden pagarles a los empleados así como estar afiliados al Régimen de Aportaciones Privadas (RAP). Además es una aportación voluntaria, no obligatoria, que puede ser una desventaja.
«Hay un montón de empresas que al no cumplir la ley, y ni cotizan el RAP o INFOP, esos trabajadores cómo van a quedar porque no van a recibir ese aporte voluntaria de los seis mil?», cuestionó, Joel Almendares, presidente de la Confederación Unitaria de los Trabajadores (CUTH).
Moncada también agregó que «el gobierno todavía no ha hecho una estrategia de subsidios a diferentes sectores. Veo políticas de crédito con tasas preferenciales, los subsidios no son realidad, lo del RAP no es efectivo ni operativo».
Hasta la fecha, Honduras registra más de mil casos a nivel nacional, siendo Cortés el departamento más golpeado por la pandemia del covid-19 en número de casos activos y de fallecimientos.
Se ha criticado que el gobierno no ha integrado a las mesas de trabajo y en la toma de decisiones a personas expertas que manejen el tema.
«Cómo van abrir un comercio si especialistas le están diciendo que hay dos semanas críticas y básicamente en Valle de Sula», expresó Almendares.
