Entre septiembre y octubre del 2017 el Congreso Nacional de la República procedió a nombrar de forma transitoria al nuevo rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras UNAH, desconociendo la representación estudiantil y violando la ley orgánica del alma mater, dice en su manifiesto la Mesa Nacional de Derechos Humanos. «Las autoridades universitarias, anteriores y actuales, continúan violando la libertad académica de profesores y estudiantes. En consecuencia, no se ha generado una verdadera reforma universitaria; por el contrario se trata de instaurar un sistema represivo que no permite una visión interdisciplinaria de la ciencia, sino que restringe la libertad de pensar, la creatividad y el desarrollo del proceso técnico científico comprometido con la transformación del país.»
Edy Tábora, miembro de la Mesa Nacional de los Derechos Humanos, planteó que le están solicitando al nuevo rector universitario que llame a un diálogo sobre el derecho a la educación pública, porque al excluir a los estudiantes de la participación no se van a lograr acuerdos sobre la clase de educación de superior en Honduras y en particular de la UNAH. Asimismo, pide el retiro de los cargos presentados por la UNAH contra los estudiantes que tienen procesos penales, que son un aproximado 50 jóvenes procesados, y como un tercer punto el reintegro de todos los estudiantes expulsados a nivel nacional.
El director de C-Libre consideró que si no hay diálogo, no se retiran los cargos administrativos y penales y no se reintegran los estudiantes expulsados, se van a reactivar las protestas estudiantiles, «porque cuando no se escucha a las partes, solo les queda la protesta a los estudiantes para ser escuchados. La solución de un conflicto que está activo en la UNAH está en manos del rector interino.»
Según el ex fiscal de los derechos humanos, todos los delitos de que se les acusa a los estudiantes son a instancia de parte, por lo que se pueden revertir jurídicamente si el nuevo rector tiene disposición de encontrar una solución. «Así como se presentó la denuncia así se pueden retirar los cargos. El código penal lo permite en los delitos de instancia particular, si la víctima lo considera o se llega a una conciliación. Los estudiantes universitarios no pueden cometer delito de usurpación porque pertenecen a la institución.»
Tábora manifestó que los estudiantes han instado a una mesa de diálogo que no ha dado los resultados, y las organizaciones de derechos humanos tienen los insumos para entregar a las autoridades universitarias; pero no ha sido posible porque el rector ha evadido pronunciarse con respecto a los procesos penales, manifestando que está en manos del Ministerio Público.
Para el defensor de los derechos humanos, el Ministerio Público ha actuado de manera parcial y sin objetividad en los procesos presentados. «Ha actuado con arbitrariedad al pedir prisión preventiva para los estudiantes y seguir generando acusaciones porque todos los delitos presentados no existen, lo que implica que el Ministerio Público actúa de manera ilegal porque estudiantes no pueden ser acusados de usurpar los espacios de la UNAH porque forman parte de la universidad.»
Tábora acusó a la Fiscalía de enjuiciamiento a los funcionarios públicos, de ser generadora de conflictos por no controlar e investigar las denuncias contra la UNAH y las denuncias contra los fiscales, «que han cometido delito, porque han presentado más de 200 acusaciones contra estudiantes pero ninguna acusación contra los funcionarios públicos que incluyen jueces, fiscales y policías por la violación a los derechos humanos.»
