CIUDAD DE GUATEMALA – Los fiscales del Ministerio Público de Guatemala y CICIG han acusado al ex presidente y alcalde de la ciudad de Guatemala, Alvaro Arzu, de financiar su campaña política con corrupción.
La fiscal Thelma Aldana dijo que buscaría que se levantara la inmunidad de Arzu, según la fiscalía, Arzu habría financiado su campaña con dinero ilícito.
Las acusaciones se basan en el testimonio de la esposa del ex oficial del ejército Byron Lima. Lima estaba cumpliendo una sentencia por el asesinato en 1998 del obispo guatemalteco Juan José Gerardi antes de ser asesinado en un motín de prisión el año pasado.
Lima fundó un grupo de negocios que presuntamente canalizaba dinero al partido de Arzu.
Ivan Velásquez, jefe de la comisión de los Estados Unidos, dijo además que Arzu pagó sueldos de la alcaldía a los familiares de Lima. Alvaro Arzu es actualmente alcalde de la ciudad de Guatemala.
Arzu dijo en una conferencia de prensa que había dado puestos de trabajo en la ciudad a los familiares de los presos para ayudarlos, argumentando que las funciones que cumplían eran reales.
«Esta es nuestra Guatemala, no una Guatemala dirigida por extranjeros», dijo el expresidente, en una aparente referencia al colombiano Velasquez, que dirige la CICIG.
El portavoz de la Policía Nacional Civil, Pablo Castillo, dijo que el abogado Moisés Galindo fue arrestado por presuntos vínculos con el lavado de dinero. Aldana dijo que el arresto de Galindo estaba relacionado con la investigación que involucró a Bayron Lima, el ex oficial del ejército.
Aldana dijo que la ex esposa de Lima compartió grabaciones con investigadores que sugieren que las propiedades de Lima fueron entregadas a Galindo para que sean puestas en su nombre. Las propiedades supuestamente eran una forma de pago de los presos a Lima para que fueran transferidos dentro del sistema penitenciario.
El hermano de Lima, Luis Lima, también fue arrestado, según la comisión anticorrupción de la ONU que trabaja en Guatemala. Reyes es un testigo protegido y fue trasladado fuera de Guatemala para su seguridad.
Byron Lima Oliva (Guatemala, 1969–Fraijanes, Guatemala, 18 de julio de 2016) fue un militar y recluso guatemalteco ampliamente influyente y conocido por su posible involucramiento con el asesinado del obispo Juan Gerardi en 1998, durante el gobierno del ciudadano Alvaro Arzú y por haber sido acusado por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala de ser el jefe de facto de las prisiones guatemaltecas. Lima Oliva siempre negó ambas imputaciones
