Roatán, Honduras.
Fue arrestado en Roatán, Islas de la Bahía, el argentino Franco Lombardi, también conocido como «El Mago», quien según autoridades estaba siendo investigado por los delitos de lavado de activos y narcotráfico.
El operativo fue ejecutado por agentes de la DEA (Oficina de Administración para el control de Drogas, por sus siglas en inglés) y de la Dirección de la Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) en Honduras.
El detenido fue trasladado en helicóptero a Tegucigalpa donde será puesto a las órdenes del Instituto Nacional de Migración para conocer su situación migratoria en el país.
Lombardi era propietario de inversiones en La Ceiba, San Pedro Sula e Islas de la Bahía. Recién el 25 de marzo inauguró el lujoso restaurante El Barco, valorado en varios millones de dólares.
Con la caída de Lombardi se da un duro golpe a las estructuras de la droga en la zona norte del país.
Según fuentes de entero crédito dentro del Ministerio Público, el cartel del Mago era una de las estructuras de lavado más importantes de Honduras.
«Le daban diez millones de dólares hoy y en cinco días los había movido todo» —nos dijo la fuente que pidió ser no identificado por razones de seguridad.
Con la caía del «Mago», las autoridades concentran su esfuerzo en dar captura con el resto de la estructura del cartel.
Rosillo Escoto, esposa de Lombardi y su mano derecha en el bar «El Boske», Juan Carlos Moncada, están siendo buscados por las autoridades por cargos similares.
Igualmente Marlon Clark, Danny Mcnab y Calvin Dodden, quienes según las autoridades trabajaban con Lombardi luego de haber sido parte de las estructuras de «El Negro» Lobo, presentan orden de captura que la policía piensa hacer efectivas en las próximas horas.
«Lo mejor que podrían hacer estas personas es entregarse —nos dijo nuestra fuente del Ministerio Público—. Sabemos que hay orden de eliminarlos que viene desde Colombia, para limpiar así cualquier vínculo que pueda desnudar la relación que hay entre los carteles colombianos y empresarios de San Pedro Sula, La Ceiba y Roatán».
Luego de la noticia de la detención de Franco Lombardi, unos doscientos residentes de Punta Gorda se abalanzaron en contra del restaurante El Barco y saquearon completamente las instalaciones.
«Querían prenderle fuego al lugar» —nos dijo un testigo del incidente. Recordándonos que fueron precisamente ellos (los residentes de Punta Gorda) quienes construyeron el lujoso edificio.
Lombardi llegó a Honduras en 2013 con ánimo de cambiar su vida. Colocó una pequeña empresa de relleno de tintas para impresoras a la par del City Mall en San Pedro Sula, de donde luego se trasladó a Roatán.
