Criticando a los partidos políticos de derecha en Nicaragua por los «procesos de desestabilización» en el país, el presidente salvadoreño Salvador Sánchez Cerén mostró su apoyo al presidente Daniel Ortega y su gobierno.
«Esperamos que el pueblo nicaragüense resuelva sus problemas, que nadie intervenga» y «mi posición es ayudar a este proceso a través del diálogo», dijo Sánchez en un comunicado emitido por la oficina presidencial, según una nota de Tele Sur.
Sánchez Ceren, ex guerrillero del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), dijo que las protestas contra Ortega son de grupos «que se han preparado durante mucho tiempo fuera del país» y que «son desestabilizadores porque quieren derrocar» un gobierno legítimamente elegido».
«¿Cómo es posible que la derecha apoye procesos desestabilizadores?» Cuestionó el ex comandante guerrillero, quien aseguró que este sector también respaldaba a los «grupos criminales que estaban asesinando» en Venezuela, pero que esa nación «ahora está calmada, está en paz».
Sánchez criticó las acciones de los oponentes violentos de Ortega, diciendo que tenía efectos «desestabilizadores» en Nicaragua. «Son desestabilizadores porque quieren derrocar a un gobierno legítimamente elegido» dijo el jefe de Estado de El Salvador.
