NUEVA YORK
El presidente de Honduras dijo el lunes que los recortes en el apoyo de los Estados Unidos a Centroamérica obstaculizarían los esfuerzos para frenar la inmigración ilegal, ya que acogió con satisfacción la creciente presencia diplomática de China en la región como una «oportunidad».
En una entrevista, el presidente Juan Orlando Hernández lamentó que los compromisos previos de Estados Unidos para aumentar la inversión en Honduras, Guatemala y El Salvador hayan disminuido desde que asumió su homólogo estadounidense, Donald Trump.
El presidente de EE. UU. Se ha comprometido a construir un muro a lo largo de México-EE. UU. frontera para frenar la inmigración ilegal. La mayoría de los migrantes que dejaron de intentar cruzar la frontera ahora son de esas tres naciones centroamericanas violentas y empobrecidas.
Desde que Trump se convirtió en presidente, Hernández dijo que Estados Unidos había mostrado una gran disposición a trabajar en la lucha contra las pandillas callejeras conocidas como maras que han amenazado a Centroamérica. Pero dijo que estaba menos preparado para apoyar financieramente a la región.
Bajo un esquema para fortalecer a Centroamérica lanzado en 2014 conocido como el Plan de la Alianza para la Prosperidad en el Triángulo Norte, Estados Unidos se comprometió a presentar un dólar por cada cuatro que Honduras invierta, dijo Hernández.
Pero ese compromiso no se ha materializado, agregó.
«Eso obviamente tendrá repercusiones», dijo a Reuters. «Porque toda la idea de la Alianza para la Prosperidad … era atacar el problema de la migración desde la raíz».
Entre 2016 y 2018, la ayuda extranjera combinada de los Estados Unidos para Honduras, Guatemala y El Salvador disminuyó en más de un tercio a $ 195 millones, según los datos oficiales de los EE. UU.
Sumándose a los desafíos que enfrenta la región, la administración Trump anunció a principios de este año que terminaría con la protección migratoria temporal para decenas de miles de hondureños y salvadoreños que viven en los Estados Unidos.
Mientras tanto, China está fortaleciendo sus lazos con América Central.
El mes pasado, El Salvador rompió relaciones diplomáticas con Taiwán a favor de China, alegando razones económicas y siguiendo a Panamá en 2017.
Honduras es uno de los países en disminución que aún mantiene relaciones diplomáticas formales con Taiwán.
Hernández dijo que la creciente presencia diplomática de China representa un «dilema» para la región, pero también «una oportunidad para todos», siempre que haya «reglas claras». Es probable que otros países sigan el ejemplo de El Salvador y Panamá pronto, agregó.
«Vemos que las cosas están cambiando en América Central. Creo que Estados Unidos ha llegado un poco tarde para verlo», dijo.
Cuando se le preguntó si Honduras cambiaría a China, el presidente dio una respuesta cuidadosa sobre lo que depara el futuro.
«Todavía estamos con Taiwán. Cada país sigue el principio de autodeterminación, que puede tomar sus propias decisiones», dijo. «Por el momento, apostamos por una relación comercial con Taiwán, una ventana para ingresar al mercado asiático».
Una prueba crucial de si Washington estaba preparado para reafirmar su compromiso con la región sería una reunión planeada para mediados de octubre con funcionarios de los Estados Unidos, las naciones centroamericanas y México, dijo Hernández.
Fuente: VOA
