Este fin de semana en un hotel de la capital, el Partido Anticorrupción, ahora liderado por Marlene Alvarenga, sostuvo su asamblea general para ratificarla como candidata a la presidencia y para hacer la conformación de las planillas a cargos de elección popular que el partido presentará el día martes ante el Tribunal Supremo Electoral. Alvarenga, electa presidenta del instituto político tras una asamblea realizada después de las elecciones internas que se llevaron a cabo el 21 de mayo, lideró el evento junto a las figuras que siempre le han otorgado su respaldo, como su diputado suplente Ernesto Román, que también fue electo vicepresidente del PAC, y el diputado Liberato Madrid, que aspira a repetir su diputación.
El evento se caracterizó por el liderazgo de las mujeres y por un fuerte elemento religioso, incluyendo la lectura de pasajes bíblicos por parte de los que presidieron la mesa. «Somos la primera opción para rescatar al Partido Anticorrupción y a nuestra amada tierra Honduras,» manifestó la candidata presidencial ante la concurrencia. «Con ayuda de Dios, con ayuda de usted pueblo hondureño, de usted candidato, con su lealtad, con su esfuerzo, con su entrega vamos a poder hacer posible que Honduras tenga un nuevo nacimiento. Somos la esperanza de Honduras, somos la esperanza del Partido Anticorrupción. Vamos a luchar para conquistar a Honduras.»
Además de pedir a los asistentes su compromiso para llevar al Congreso Nacional y a las alcaldías el mayor número de representantes, la candidata presidencial expresó ante los medios de comunicación su propuesta para asegurar al pueblo hondureño que los candidatos presidenciales son personas probas y honorables: «Quiero aprovechar para proponerle al Partido Liberal de Honduras, al Partido Nacional de Honduras, a la Alianza Libre-PINU, la DC, Partido Vamos, Alianza Patriótica, FAPER y la candidatura independiente a la Presidencia de la República que así como se les ha hecho el examen del polígrafo a la Policía Nacional de Honduras, a los fiscales y a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, que hoy todos los candidatos a la presidencia podamos someternos a esa prueba del polígrafo,» manifestó la candidata y actual presidenta del PAC. «Quiero que juntos me ayuden a exigirle a todos los candidatos a la Presidencia de la República para que nos sometamos a pasar pruebas de polígrafo pero no con poligrafistas hondureños, sino con poligrafistas internacionales avalados por la Embajada de los Estados Unidos y organismos internacionales. Yo, Marlene Alvarenga, como mocionante de esta propuesta, soy la primera en ponerme a disposición para que me hagan esa prueba poligráfica. Marlene Alvarenga no tiene cola que le pisen.»
La propuesta de Alvarenga se afinca en el contexto donde todos los candidatos presidenciales se encuentran cuestionados por un sector u otro, sea por sus finanzas personales, las finanzas de sus partidos o los escándalos de corrupción que han plagado gobiernos pasados y presentes, como una forma de brindar algún tipo de credibilidad a la imagen de los mismos. Si bien es cierto que Marlene Alvarenga por sí sola no sería capaz de impulsar una campaña para llevar al polígrafo a todos los presidenciables actuales en el país, la candidata cuenta con aliados que podrían dar impulso a esta iniciativa, que a pesar de tener cierta validez podría ser rechazada por otros actores políticos en base a conflictos preexistentes.
