En un pueblo de Indonesia, personas que no sigan las medida de quedarse en casa son encerradas en «casas embrujadas».
Una funcionaria de Sragen, Indonesia al ver que las personas no permanecían en cuarentena, decidió emitir un decreto en la cual castiga a los infractores que salen de su casa encerrándolos en viviendas que han sido abandonadas, ubicadas en la isla de Java.
Las población cree en las leyendas locales de que los sitios podrían estar embrujados, es por eso que el gobierno tomo esta decisión drástica para motivar a las personas supersticiosas que no salgan.
Hasta el momento, cinco personas han sido encerradas en estas casas abandonadas.
El decreto publicado en Sragen busca regular la afluencia de indonesios en la región que provienen de ciudades del país. Ante el incumplimiento de las normas de aislarse dos semanas tras su llegada, lograron identificar viviendas para acondicionarlas con camas y muebles, separándolas por cortinas y condiciones de albergue.
Las personas castigadas tendrán que permanecer dentro de estas instalaciones donde los locales consideran que habitan fantasmas por dos semanas completas. Se les brindará alimentos pero no podrán salir, para darles una valiosa lección de no volver a romper la cuarentena.
