«El presupuesto aumenta, pero se siguen teniendo los mismo índices de pobreza»: Ismael Zepeda

EGO25 noviembre, 2019

Entrevista Ismael Zepeda, economista y analista del Fondo Social para la Deuda Externa en Honduras (FOSDEH)

¿El presupuesto General de la República es un instrumento de desarrollo en Honduras?
Es un instrumento de desarrollo donde se materializan las políticas públicas, para una mejor educación, mejorar la calidad de la salud, la construcción de la infraestructura vial, la seguridad ciudadana. Todo deberá estar reflejado en el presupuesto general de la República.

El Presupuesto para el año 2020 es fuerte para los recursos que maneja la economía nacional, 282 mil millones de lempiras, equivale al 45 por ciento del producto interno bruto (PIB) que este año 2019 fue de 262 mil millones de lempiras, esto significa un incremento del 8 por ciento aproximadamente.

La administración central comprende las secretarias de Estado y direcciones del Poder Ejecutivo del gobierno y, las descentralizadas las conforman las empresas públicas y algunas instituciones autónomas, dentro de las descentralizadas también se encuentran los institutos de previsión, estas instituciones generan sus propios recursos por los servicios que proveen mientras que la administración central se financia con impuestos, como el 15 por ciento de cada bien de consumo, o el impuesto sobre la renta. Otro componente es el impuestos por los combustibles que para el año 2020 se tiene proyectado recibir 15,5 mil millones de lempiras, por cada galón de gasolina súper que en la bomba se paga a 34 lempiras que son para la administración central y todo va a una caja común.

Existe otra línea fuerte que es el endeudamiento público que para el año 2020 será de un aproximado de 5 mil millones, más 109 mil millones que se obtienen del financiamiento del gobierno central.

Para el economista y analista del Fondo Social para la Deuda Externa en Honduras (FOSDEH), Ismael Zepeda, no existe ningún tipo de rendición de cuentas de los 109 mil millones de lempiras que se asignan a las secretarias de Estado de la administración central.

El gabinete económico anuncio una recesión económica en el país, lo que implica la perdida de trabajos, perdida del ingreso de la familia, sin embargo se da una bipolaridad 20 días después la Secretaria de Finanzas, parte del gabinete económico dice que se está lejos de una recesión económica y, que de presentarse una situación económica de esa naturaleza las proyecciones positivas de recaudación se verán afectadas, porque ante la falta de recursos la gente se limita de consumir, compra menos combustible, menos artículos y productos por los cuales tenga que pagar el 15 por ciento y que lo considere que no le es necesario, implicará el recorte de gastos del presupuesto asignado las secretarias de Estado, la perspectiva es que no se afecte a las secretarias como las de educación y salud, servicios prioritarios para la población. Manifestó el economista.

Zepeda explicó, que los señalamientos al gobierno por algunos sectores de la sociedad son de que los presupuestos de salud y educación, han sido reducidos en los últimos 10 años, nominalmente se han aumentado, cuando se observa la asignación real de ese presupuesto a estas instituciones, a la secretaria de educación se le asignaba el 18 por ciento de todo el presupuesto en el 2010, pero fue de 123 mil millones en números reales 20 mil millones pero, ¿qué paso en el 2019? el prepuesto es de 262 mil millones, eso significa para la educación 29 mil millones que no equivalen al 18 por ciento, solo es el 11 por ciento de todo el presupuesto.

Es cierto que ha crecido año con año nominalmente pero, la relación de cuanto se le asigna es cada vez menor, porque crece la burocracia que termina absorbiendo el presupuesto de esta secretaria, lo mismo pasa con la secretaria de salud en el 2010 se le asignaba el 12 por ciento que era equivalente a 9 o 10 mil millones de lempiras, para el 2019 se le incrementó nominalmente a 16 mil millones, pero no es el 12 por ciento, sino que equivale al 9 por ciento y disminuyendo.

Sin embargo para seguridad y defensa tenían un presupuesto del 3 por ciento, el que ahora es de un cinco por ciento de 2,500 millones lempiras en el 2010 ahora asciende a 9 mil millones de lempiras en comparación con salud y educación se ha triplicado anualmente.

El presupuesto del año 2020 sigue las prácticas antiguas priorizando programas y proyectos que no reflejan transparencia, obviando la corrupción con contratos de proveedores de servicios al Estado y aprovechándose de algunos recursos.

Si el presupuesto se utilizara como un instrumento de desarrollo tendría un impacto en la desigualdad, en la equidad, en la mejoría de las condiciones de vida, se vería en la infraestructura y en el bienestar de la sociedad.

Por el contrario el presupuesto crece año con año, pero se siguen teniendo los mismos índices de pobreza, de subdesarrollo, de competitividad en el foro económico mundial, una burocracia ineficaz.

Honduras es un país difícil para hacer negocios dice el Banco Mundial (BM), en los últimos 10 años hemos sido aplazados en todo, estos recursos que tiene en sus manos el gobierno no están generando un impacto positivo.

Según Ismael los diputados en el Congreso Nacional, deberían no fijarse en el presupuesto del año pasado, sino en cómo se va ejecutar, porque se aprueba en diciembre.
El presupuesto debería tener la liquidación más actualizada que sería la del mes de noviembre, cómo se ha ejecutado desde enero la asignación presupuestaria de cada secretaria como principio básico para la aprobación del presupuesto del 2020.

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