Entrevista con el sociológo Eugenio Sosa.
Lo interesante de la Plataforma de Lucha en Defensa de la Salud y la Educación, -dice Sosa- es que la conforman dos sectores que han sido golpeados en los últimos 10 años, los trabajadores de la salud con la tercerización en los hospitales que se convirtió en una amenaza, pero han sido más golpeados los maestros con todos los acuerdos ejecutivos, el golpe más fuerte contra el magisterio fue la derogación del Estatuto del Docente que les otorgaba condiciones de carrera laboral.
La Plataforma logra levantarse de lo que tenía mancillado a los dos sectores aprovecha el contexto y como pocas veces, coloca en el centro un problema que es una necesidad de la población: la privatización de la salud y la educación.
Sosa considera que el magisterio fue golpeado porque de alguna manera como sector había estado desconectado y sigue estándolo de los intereses reales de la sociedad. Existe poca preocupación por la calidad educativa, por la exclusión educativa, no se escucha. ¿En dónde se está debatiendo la verdadera problemática educativa del país? se está haciendo al calor de la plataforma afirma el sociológo.
La Plataforma sobre todo en los meses de mayo y junio tomó protagonismo e invisibilizó a Libre porque el problema con Libre, es que tienen que aceptar algunas cosas como un hecho. Libre dejo de ser y no será más el actor hegemónico en las calles, Libre es, y lo será más, cada vez más un partido institucionalizado en el sistema de partidos políticos“, que girará su quehacer entorno a procesos electorales, a negociaciones con opositores o con el poder para mantener cuotas de poder para llegar al gobierno, dice Sosa.
¿Qué pasa? -se pregunta Sosa- Que existe una franja que simpatiza y activa con Libre y reclama lo que Libre tiene como discurso: que con insurrección va derrocar el régimen desde la calle, pero en la práctica y en la realidad no es la preocupación fundamental que Libre ha asumido.
La gente quiere movilizarse porque además de los problemas directos que le afectan hay un ambiente de rechazo, de odio contra el gobierno por producto de la ilegitimidad, los fraudes, la corrupción, el narcotráfico y las mentiras, afirma el sociológo.
Entonces lo que hace la Plataforma bajo el liderazgo de la doctora Figueroa es poner el enfoque donde la gente quería, con esto la gente sale y se desborda porque la Plataforma fue más allá de un movimiento de profesores y médicos, fue un movimiento que tuvo acompañamiento popular.
Alguna gente por ingenuidad llegó a decir que la plataforma se habia ido hacia arriba y Libre para abajo. En términos de competencia o disminuirle, no le va afectar a Libre, si le afectara sería mínimo porque solo es el sector que quiere ver a Libre en las calles. Porque la línea de Libre es electoral e institucional, existe otra razón los movimiento sociales tiene un ciclo, explica Sosa.
La Plataforma desde que entró al diálogo en la práctica cerró un ciclo de movilizaciones. Por otra parte -explica- el gobierno de alguna manera al derogar los PCM se sacude las demandas, pero desde el momento que se va a un diálogo va a la mesa no a la calle, que son dos cosas diferentes.
«La plataforma cierra un ciclo y cuando se anuncia que se une con empresarios y ONG´s para unirse a la lucha contra el nuevo código penal, lo cual es bueno, pero esa instancia que se ha formado no es instancia de calle, es una instancia de lobby, de cabildeos de medios de comunicación es una instancia para operar en el ámbito mediático, significa que el ciclo de calle de la proforma se cerró por este momento, no quiere decir que dentro de un determinado tiempo no regresen, porque estos gremios tienen la capacidad y el país sigue teniendo los mismos problemas y Hernández gobierna en casa presidencial donde hay demasiado combustible regado por todos lados, por una cantidad de problemas y en cualquier momento toca, o pisa mal puede encender la llama no de estos sectores, de cualquier otro que salga con fuerza y credibilidad la gente va salir a apoyarle porque la gente rechaza y odia al régimen». Afirma Sosa.
La doctora Suyapa Figueroa, lo que disputa es que libre ya nos es hegemónico en las calles, pude aparecer otro actor con más fuerza y credibilidad que la que Libre tenía en las calles.La doctora Figueroa podría disminuir el caudal político electoral si decidiera entrar a la arena político electoral, sin embargo hasta el momento ella ha manifestado no tener interés en la política electoral. Explica el docente.
Existe un problema y es que el sistema político hondureño está bastante fragmentado y esos fragmentos ocupan muchos espacios que no dejan espacio para que alguien se levante como una opción.
Además agrega Sosa Libre tiene un camino más estructurado, con treinta diputados en el Congreso Nacional, grupos de alcaldes, regidores y activistas y recursos porque al estar en el poder genera recursos, tiene paricipacion en la institucionalidad estatal, tiene representares en el Tribunal Superior de Cuentas (TSC), Unidad de Política Limpia, Registro Nacional de las personas (RNP) y estará en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y en el Tribunal de Justicia Electoral (TJE).
No es fácil para la doctora Figueroa, los espacios están disminuidos, pero también puede haber posibilidades de una candidatura para una mujer como Juliet Handal, buena mujer con respeto en la sociedad que no ha dirigido grandes movilizaciones, pero ha levantado banderas importantes, nadie la trata de corrupta, pero sabe que no es el momento en el que no hay que interrumpir. Considera el analista.
Porque Partido Nacional tiene captación de votos, el Partido Liberal, aunque fragmentado también, Salvador Nasralla tiene una buena cantidad de votos, en la universidad entre los estudiantes Nasralla es el político más popular aunque se den enfrentamientos, movilizaciones el liderazgo lo tiene Nasralla no lo tiene Libre con mediciones científicas del departamento de sociología, expresa el sociológo.
Se tienen que ver estos liderazgos -explica Sosa- si Nasrala tiene la capacidad de disputar ese liderazgo con opciones reales para ganar, se tiene que ver que va pasar en el Partido Liberal si Luis Zelaya mantiene el control o lo pierde, cuál será el derrotero del Partido Liberal, ¿seguirá hacia abajo o se levanta? ¿Libertad y Refundación volverá a cuajar otra alianza o se medirá como partido? que sería la medición real como partido, porque en la primera elección tenía todo el auge antigolpe, todo la emoción de la gente que se desbordaba por ir a ver a Xiomara a Santa Bárbara. En las elecciones del 2017 contó con una alianza y con un caudal de votos importantes. Hasta ahora es que Libre está demostrando que es verdaderamente una fuerza política. Explica Eugenio Sosa.
La insurrección es coyuntural, tarde o temprano se llegarán a acuerdos, porque ya se han dado, porque Libre ha entrado al sendero del sistema de partidos políticos y juega allí en esa cancha con reglas, algunas democráticas y otras nada democráticas, pero ahí es un partido más, que llegó y ha movido el sistema de partidos, no es un movimiento social, por lo tanto su escenario natural es allí, en el futuro la insurrección legislativa será un bonito cuento político. Concluye Sosa.
