El dolor humano, el negocio de algunos medios de comunicación

ABarahona30 enero, 2020

“Me exhibieron ante muchos medios de comunicación como una delincuente de grandes magnitudes, sin que un periodista llegara al lugar donde había sido detenida por la Policía Nacional y darme el derecho a responder si era cierto o no de lo me acusaban o escuchar mi versión de los hechos”

Expresó una hondureña, que no quiso revelar su identidad, y que fue expuesta ante muchos medios de comunicación luego de que fuera acusada por una empresa de haberse, supuestamente, apropiado de dinero.

Ella, explicó que el día de su captura los miembros de la Policía Nacional le informaron que la empresa que la acusaba estaba exigiendo fuera presentada ante los medios de comunicación como una supuesta delincuente y hacer trascender la noticia de su captura.

Esa es la cruda realidad que atraviesan muchos hondureños al momento de vivir un acontecimiento trágico como ser acusado de algún delito, que un familiar haya sido asesinado, que alguna persona se haya quitado la vida, en fin, un hecho que a la sociedad hondureña le venden como noticia sin importar el daño que le ocasionan a las víctimas que lo padecen o a sus familiares.

En los últimos años la prensa hondureña a utilizado el recurso de amarillismo o sensacionalismo en la manera de presentar las noticias.

Un ejemplo claro es cuando una persona es asesinada, los medios de comunicación cubren la noticia, en ocasiones, los familiares acuden al lugar y estos presentan el dolor que enfrenta las personas al ver a un familiar en esa condición; Presentan el dolor como noticia para captar la atención de sus audiencias sin importarles el sufrimiento o el daño que esto podría provocar.

Otro ejemplo es cuando una persona es detenida por algún delito o hecho reñido con la ley; Los medios de comunicación exhiben a las personas como culpables sin haber sido vencidos en juicio y en la mayoría de los casos no permitiéndoles a los acusados el derecho a réplica o defenderse ante tal acusación.

El periodismo hondureño se encuentra en una encrucijada entre la línea de la ética profesional y el sensacionalismo o amarillismo y la misma exageración de los hechos que se vuelven noticia.

Protesta de los periodistas hondureños en rechazo a los abusos de autoridad de miembros de seguridad en su contra.

¿Qué es el sensacionalismo o amarillismo?

 

Para entender un poco de la situación en los medios de comunicación se debe de definir el concepto de amarillismo o sensacionalismo.

Según el diccionario de la Lengua Española, el amarillismo o sensacionalismo se define como la tendencia de algunos medios de comunicación informativos en presentar noticias con aspectos llamativos, aunque sean secundarios, en algunos casos, con finalidad comercial tratando de generar asombro o escándalo.

Presentar la noticia de forma polémica, escandalosa o exagerar la misma utilizando recursos como información dudosa, dañina o falsa en perjuicio de otros o manipulando aspectos, buscando generar mayor audiencia o ganancias económicas del medio de comunicación escrito, radial o televisivo, es una característica del amarillismo o sensacionalismo.

La brecha de la ética profesional y la línea del medio se vuelve un factor clave al momento de presentar un hecho o una noticia.

El director de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Noé Leiva, señala que los medios de comunicación “son una empresa mercantil” con la diferencia de que tienen una labor social de trascendencia y es ahí donde la ética no debe ser superada por la exageración y el amarillismo.

“Se debe de cubrir la noticia de la manera tal como ocurrieron los hechos, el sensacionalismo no es nada nuevo, pero en Honduras los medios de comunicación lo han utilizado de manera errónea. Presentar la noticia con el enfoque de educar a la sociedad e instruirla debería ser el factor principal de los medios de comunicación. No se puede presentar o decir lo que la población quiere escuchar, sino presentar la noticia sin recurrir a la exageración o al amarillismo” puntualizó, Leiva.

 

Después de trascender el rechazo de los televidentes el medio QhuboTV se retracto.
Autorregulación: la manera de detener la exhibición del dolor y la tragedia de los hondureños.

 

Como lo señalábamos anteriormente, algunos medios de comunicación en Honduras, en los últimos años, han utilizado la estrategia de exageración de la noticia para generar la atención de la población hondureña.

Presentar secciones de homicidios, suicidios o cubrir hechos dolorosos que son parte del día a día de la población hondureña como ser: accidentes de tránsito, funerales, ingresos a los centros de atención médica, peleas entre familias, etc., se ha vuelto una forma de vender la noticia.

Para el presidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), Dagoberto Rodríguez, el problema radica en que los medios de comunicación utilizan la violencia, inseguridad, injusticias, entre otros, recurriendo a la exageración y el amarillismo para atraer a la opinión pública sin establecer autorregulación de imágenes o videos dantescos que causan dolor o indignación a los afectados.

“En Honduras hay una realidad que no se puede ocultar que es el tema de la violencia, inseguridad, injusticias y falta de empleo, por ende, hay temas e informaciones que no pueden pasar desapercibidos a los ojos de la opinión pública. Cada medio de comunicación debe establecer pautas, manuales de estilo, sistemas de autorregulación que permitan que ese tipo de imágenes dantescas o tipos de situaciones que causan dolor a las familias o generan conmoción, se regulen”.

Para Rodríguez, el Estado no debe ser el garante de regular el contenido que ofrecen los medios de comunicación porque caería en una firme violación a libertad de expresión y libertad de prensa, sino los mismos medios de comunicación a través de sus dueños, directores de prensa y periodistas.

“Los periodistas y los medios de comunicación deben establecer pautas de autorregulación para no dañar la susceptibilidad de su público, la mejor medicina frente a ese problema que estamos enfrentando es que podamos llegar a un gran consenso o acuerdo para establecer pautas de contenidos que limiten dañar a las personas” explicó.

 

El respeto a la dignidad humana contrarresta el morbo que mantiene la sociedad

 

No se puede ocultar la violencia que atraviesa el país, esto es parte de las noticias diarias, pero la forma actual de presentar hechos violentos ha fomentado el morbo; ahora cuando se escucha anuncios de “última hora” la gente reacciona esperando una cantidad de muertos o una noticia que promueve la violencia.

Reiterar que son hechos noticiosos que no se pueden ocultar y que el periodismo tiene la tarea de presentarlos, pero hasta que nivel; Involucrar el daño a terceros por mantener satisfecho a su auditorio deja de ser noticia y casi se vuelve un espectáculo.

Para el Coordinador de la Carrera de Periodismo de la UNAH, Francisco Javier López, los principales valores que se debe fomentar en el periodismo es el respeto a la dignidad humano, presentar la noticia sin vulnerar los derechos de las víctimas y sus familiares.

“Uno de los principales valores que debemos cuidar, custodiar y fortalecer es el respeto a la dignidad de la persona humana, algunos medios de comunicación, en su afán de atraer más audiencia, abusan de un sensacionalismo y amarillismo extremo que vulnera los derechos de las víctimas y sus familiares, así como la dignidad de las personas” detalló, López.

También señaló que se contribuye de una forma extraordinaria a hacer crecer el morbo del público el que a razón de la regularidad de esas imágenes que se muestran va perdiendo la sensibilidad, por lo que los hechos violentos se ven más como espectáculo.

En el caso de la exhibición de detenidos que presentan los medios de comunicación como sección de “Policiales”, López explicó que mientras una persona no es declarada culpable de lo que se le acusa, no puede ser expuesto como culpable ante la palestra pública.

“Ni se puede mostrar ante los medios de comunicación a los detenidos bajo cualquier acusación porque toda persona es inocente hasta que no se demuestre lo contrario, es más fácil votar la imagen de alguien, pero es muy difícil restablecerla, en el ánimo de ganar audiencia se cometen muchos abusos” aseveró.

Wendy y Herminio la noticia que vendieron como «un gran amor», tiempo después se divorciaron.

El tratamiento de la «Nota roja»

 

Para, Aldo Romero, Director de la Carrera de Periodismo de CEUTEC, explica que en los últimos años la noticias policiales-judiciales conocida como “nota roja” se han vuelto más un espectáculo y un show para entretener a la gente.

“Lo que ha existido por años en la nota roja es un desconocimiento total de los cuidados éticos al momento de informar sobre los sucesos y la falta de una construcción de una verdadera cultura para el adecuado tratamiento de la información judicial-policial; Las organizaciones judiciales nunca se preocuparon por enseñar capacitar y entrenar a los periodistas sobre el tratamiento de los sucesos”

“El problema es que le hemos cultivado el morbo a la genta, hay canales que se dedican a la cobertura de noticias judicial-policial y acostumbraron a la gente a ese tipo de noticias”.

“La nota roja no es para generar morbo, no es para satisfacer la curiosidad de la gente, ahora se caracteriza por melodramas, matices de exageración. Los medios de comunicación aprendieron que ese tipo de sucesos, y explotarlos de esa manera, atrae el morbo de la gente y esto no es lo correcto. la clásica lucha por la audiencia la prioridad ya no es informar la prioridad es impactar” Explicó, Romero.

Para Romero, ahora los medios presentan titulares cargados de apodos, promueven el drama humano y esto “se vuelve un show, un espectáculo en vez de una noticia”. Explotar el dolor de la gente no es una forma correcta de hacer periodismo, debemos ir orientando la cobertura de sucesos más, a buenas prácticas y evitar el manejo sensacionalista.

También declaró que un periodista debe ver la noticia como si fuera él, ponerse en el lugar de las personas. Según Romero, “la gente necesita ser tratada como seres valiosos. Él debe ser la persona cuyos valores y principios vayan acorde con las exigencias de la comunicación”.

Diario escrito de circulación nacional.

 

 

 

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