LA DULCE CALMA ANTES DE LA TORMENTA

CRÓNICA PARLAMENTARIA

Una breve semana de actividades tuvieron nuestros honorables padres de la patria, ya que el paro de transporte fue el evento ideal para que no se lograra el quórum el jueves. Entre apariciones de ciertos mencionados en el Caso Pandora, interesantes tertulias y la aprobación de algunas curiosas resoluciones, los diputados sesionaron unas cuatro horas esta semana.

El martes la sesión comenzó a las 6:00 pm, tres horas después de la hora convocada para el inicio de la misma. Una vez comenzada, el secretario del Congreso Nacional de la República, Tomás Zambrano, presentó una resolución al pleno para ser aprobado, basada en el artículo 82 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional. La resolución del diputado Zambrano estipulaba que la Secretaría del Congreso Nacional tendría la potestad de revisar los dictámenes aprobados antes de enviarse al poder ejecutivo para ser sancionados, de manera que si hiciesen falta modificaciones la Secretaría las presente al pleno, que votará si se aprueban las modificaciones o no. Hace falta resaltar, sin embargo, que esta propuesta de resolución fue presentada sin haberse leído el acta de la semana anterior. Mientras el secretario explicaba lo que implicaba la resolución, los imputados del Caso Pandora hacían acto de presencia en el hemiciclo, entre ellos el diputado nacionalista Celin Discua y el jefe de bancada del Partido Liberal, Elvin Santos, quien aprovechó para conversar amenamente con el vocero de la bancada de Libertad y Refundación Carlos Zelaya. Al otro lado, el cuarto vicepresidente y diputado único del partido Unificación Democrática, el doctor Mario Noé Villafranca, se rehusaba a ocupar su lugar en la junta directiva.

Una vez tomada en consideración la moción del secretario Tomás Zambrano, los parlamentarios se dispusieron a la discusión de la misma, lo que provocó que el diputado Jari Dixon Herrera inmediatamente saliera denunciando que la motivación tras esta propuesta era el caso Fe de Erratas, donde se vio involucrado el secretario Tomás Zambrano y el prosecretario Roman Villeda. «No estoy señalando a nadie pero creo que cada quien cumple sus funciones,” sentenció, lo que provocó que el aludido le respondiera que veía una mala intención en su comentario al querer vincular un tema con el otro. Por otro lado, el diputado liberal Hugo Hernández celebró la creación del mecanismo de corrección. El jurisconsulto y veterano diputado Oswaldo Ramos Soto también tomó la palabra para opinar sobre el tema, manifestando que lo que estaba en discusión “es un tema estrictamente jurídico, no es una cuestión política.” Al final, a pesar de la insistencia de varios diputados de la oposición porque se brindara más tiempo para analizar el escrito de la resolución, el presidente en funciones, Antonio Rivera Callejas, sometió a votación la resolución de Zambrano, que terminó siendo aprobada con una gran cantidad de votos en contra. 

Mientras todo esto ocurría, varios diputados aprovecharon para ponerse al corriente de lo que ocurría con sus compañeros diputados. Tal fue el caso del diputado de Libertad y Refundación Francisco Paz, quien tuvo a bien platicar un rato con «el Pandora» Elvin Santos. Otro que no tardó en imitar su ejemplo fue el diputado Jorge Cálix y el vocero de bancada Carlos Zelaya, quienes tuvieron un momento ameno cerca de la curul del jefe de bancada liberal. Por su parte, el vice presidente Felícito Ávila, diputado del Partido Democracia Cristiana, se acercó con importantes consultas a la heredera de Marco Antonio Andino, la diputada Sobeyda Andino, quien estuvo bastante solicitada la semana anterior.

Una vez aprobada la resolución de Zambrano, se suspendió momentáneamente la sesión, se abrió de nuevo y se procedió a la lectura del acta, que esta vez tuvo una serie de reconsideraciones. Entre las muchas reconsideraciones estuvo la de la jefa de bancada del PINU, Doris Gutiérrez, quien pidió reconsiderar la aprobación del decreto que elimina el Fondo Departamental, aprobado en Gracias, Lempira. Sin embargo, aunque en los medios y en las redes varios diputados alzaron la voz en contra, no se tomó en consideración ya que ni los diputados de la oposición levantaron la mano. Luego llegó el turno de Luis Redondo, quien por primera vez presentaba cinco reconsideraciones, una de las cuales tenía que ver con un proyecto cuyo dictamen ni siquiera estaba listo, por lo que tuvo que retirar dicha reconsideración. También presentó una reconsideración pidiendo anular el proceso de elección del fiscal general, que se tomó en consideración pero no fue aprobada. Finalmente, el diputado Mauricio Villeda presentó una reconsideración para eliminar el controversial mecanismo aprobado unos minutos antes, que tampoco fue tomada en consideración dada la falta de apoyo en las bancadas de oposición. El acta se sometió a votación y quedó aprobada, y el presidente en funciones suspendió la sesión.

El miércoles la sesión comenzó con la presentación de varios proyectos de los diputados, y pronto pasó a la discusión del dictamen en segundo debate del Contrato 270-2014 con la empresa Honduras Biomass Energy, S.A. de C.V., en Guaimaca, que tiene como socio nada más y nada menos que a Abraham Bennaton Ramos. Tras la petición de dispensa de debates, el vocero de la bancada de Libertad y Refundación, Carlos Zelaya, pidió la palabra para expresar que el contrato le generaba dudas y que le reiteraran qué empresa figuraba en ese documento. Tras escuchar el nombre, el diputado manifestó públicamente que quedaba conforme y de acuerdo con el contrato, ya que conoce al empresario. No obstante, su compañero de bancada Jari Dixon Herrera, pidió la palabra para manifestar, a pesar de lo expresado por su jefe de bancada, «¿Cómo es posible que se pueda seguir haciendo negocios con personas que figuran en escándalos de corrupción?» Luego de algunas participaciones más, el contrato fue aprobado.

El diputado udeísta Mario Noé Villafranca, a pesar de ser el cuarto vicepresidente, continuó el miércoles ocupando su curul en la parte de abajo del hemiciclo en lugar de su posición en la junta directiva. ¿Qué será lo que genera la incomodidad del diputado para apartarse de sus compañeros en la autoridad del Congreso Nacional? A quien no le molesta en nada la proximidad, no obstante, es al vocero Carlos Zelaya Rosales, quien por largo rato estuvo conversando entre risas y carcajadas con el presidente en funciones, Antonio Rivera Callejas, y el secretario del Congreso Nacional, Tomás Zambrano.

Muy pronto los diputados regresaron al dictamen en tercer debate de la Ley de Control de Armas, y luego de la aprobación de algunos artículos el presidente en funciones, Antonio Rivera, tuvo a bien suspender temprano la sesión, convocando para el día siguiente a la hora acostumbrada. El paro de transporte, sin embargo, tomó por sorpresa a varios diputados, los que no pudieron llegar al Congreso Nacional, por lo que, a falta de quórum, se suspendió la sesión del jueves. A ver qué sorpresas surgen de las cajas de Pandora la próxima semana.